Destaca que el Departamento de Salud de Alicante es el segundo de España en contar con este sistema robotizado que es capaz de hacer más de 100 pruebas en cada paciente en un máximo de diez minutos
Señala que este sistema permitirá “seguir con nuestro principal objetivo que es reducir las listas de espera a través de la calidad, el ahorro de tiempo al paciente y la tecnología”
Anuncia que las obras del Centro de Salud La Torreta de Alicante se iniciarán entre el 8 y el 15 de enero, dos meses antes de lo previsto en “nuestro compromiso de mejorar la atención primaria”
El president de la Generalitat, Carlos Mazón, ha trasladado que, con la implantación del sistema de Diagnóstico Oftalmológico Robotizado mediante Inteligencia Artificial en el Departamento de Salud Alicante-Hospital General, “la Comunitat Valenciana se convierte en una de las pioneras del uso de la Inteligencia Artificial en Oftalmología”.
Se trata de un robot automatizado que hasta el momento sólo estaba incorporado a nivel nacional en el centro de especialidades del Hospital de la Paz, por lo que el centro de especialidades Babel se convierte en el segundo en contar con esta máquina de diagnóstico.
Esto permite agilizar el diagnóstico y la derivación de los pacientes con sospecha de enfermedad oftalmológica al recurso correspondiente o a la especialidad oftalmológica concreta dentro del Servicio de Oftalmología del Hospital General Universitario Doctor Balmis. Carlos Mazón ha adelantado que este sistema se irá “adaptando y ampliando” al resto de la Comunitat Valenciana.
DORIA es un sistema de cribado posicionado entre la Atención Primaria y la atención hospitalaria, de tal forma que el médico de Familia, atendiendo a un protocolo establecido, remite a los pacientes a este servicio, que en un tiempo máximo de diez minutos es capaz de realizar en cada paciente 100 pruebas diferentes. Estas determinaciones proporcionan los datos necesarios para iniciar el análisis de más de 20 patologías oculares, lo que marca un importante avance para la medicina del futuro.
El jefe del Consell ha señalado que “esta tecnología puntera nos va a ayudar a mejorar el trato al paciente y a afinar el diagnóstico”, acortando los tiempos del proceso de diagnóstico y atención oftalmológica, así como optimizar los recursos sanitarios.
Este sistema proporciona una serie de datos que después son valorados por el oftalmólogo y que sirven de guía para mejorar los tiempos de derivación de los pacientes con patología oftalmológica, lo que se traducirá en evitar visitas innecesarias y acortar los pasos para llegar a la consulta a la que deben ir dirigidos en función de la patología que se sospeche, con el fin de iniciar el tratamiento que se precise cuanto antes.
Un total de 172 pacientes han sido explorados mediante este servicio en el plazo aproximado de un mes con excelentes resultados. En un 43% de los casos se ha resuelto su derivación al especialista con esta exploración y han recibido directamente el alta o han sido derivados por problemas de refracción al óptico (estos últimos representan un 26%). Y un 57% van a ser derivados a la consulta de Oftalmología, frente al 100% de pacientes que llegaba antes.
Mazón ha indicado que esta nueva tecnología nos permitirá “seguir con nuestro principal objetivo que es reducir las listas de espera a través de la calidad, el ahorro de tiempo al paciente y la tecnología”. En esta línea ha señalado que “la estrategia de la Inteligencia Artificial en la Comunitat Valenciana ha empezado por la sanidad” porque “es nuestra prioridad número uno”.
En este sentido ha recordado otros sistemas de detección de enfermedades mediante Inteligencia Artificial implantados en nuestro territorio como el sistema de lectura de mamografías o el destinado a la detección temprana de cáncer de próstata. Así, ha remarcado el compromiso del Consell con una “sanidad pública avanzada” y “en la vanguardia de la salud pública”.
DORIA representará una gran ventaja para el sistema de salud valenciano, teniendo en cuenta el crecimiento exponencial de pacientes con problemas visuales que estamos experimentando, a consecuencia del envejecimiento poblacional, que se ve agravado por el carácter crónico de muchas patologías, como la Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE) o el glaucoma.
Esta tecnología modificará nuestra estructura actual de trabajo ya que la inteligencia artificial nos está permitiendo realizar un cribado eficiente de los pacientes y ya nos ofrece una posibilidad de diferenciar entre patología baja, media o alta, que ha de ser confirmada por los oftalmólogos con el informe clínico correspondiente.
Funcionamiento del servicio DORIA
DORIA se compone de tres partes fundamentales, la consola de gestión; un equipo auxiliar independiente que sirve para medir la graduación, y el equipo donde se realizan las pruebas oftalmológicas, que se van moviendo y adecuando al paciente.
El circuito de los pacientes con posibles patologías oftalmológicas pasa por la toma de agudeza visual, anamnesis y, por último, una exploración completa del equipo por IA con mediciones objetivas.
El paciente solo tiene que acercar su rostro al robot y, apoyándose en un soporte, se presta a la realización de una serie de pruebas a las que le va guiando el propio robot a través de un asistente digital. Así, la herramienta toma una serie de medidas que luego, a través de una computadora, recoge en un documento que es el que llega a los oftalmólogos.
En concreto, se explora la córnea, la tensión ocular, el estado del cristalino para la detección de cataratas, el fondo de ojos y detecta patologías oftalmológicas como la retinopatía diabética, la degeneración macular y glaucoma.
Centro de Salud La Torreta
Durante su intervención, Carlos Mazón ha anunciado que las obras del Centro de Salud La Torreta de Alicante se iniciarán entre el 8 y el 15 de enero, dos meses antes de lo previsto. Así, ha destacado que se ha trabajado con “agilidad” en “nuestro compromiso de mejorar la atención primaria”.
Unas obras que contarán con un presupuesto de 12,8 millones de euros y que se prevé que se ejecuten en un plazo de 20 meses desde el inicio de las actuaciones. El edificio constará de planta baja y dos plantas en altura e incluirá la dotación de 56 plazas de aparcamiento en superficie.
La planta baja albergará las áreas de Urgencias o Punto de Atención Continuada, así como del área de Extracciones y Tratamientos, el área de Pediatría, Rehabilitación, y Odontopediatría.
En la primera planta se ubicarán las áreas de Medicina de Familia, Administración, Maternidad, Salud Sexual y Reproductiva y el área de Salud Mental. La segunda planta contará con las zonas de Docencia, Conductas Adictivas y el área de Cirugía Menor.
De acuerdo con el programa funcional, el área de influencia de este nuevo centro de salud será de unos 16.620 habitantes, estimando que en un futuro se alcance una cifra superior a los 20.000.