El President de la Generalitat pasó por las instalaciones de Novelda Digital donde hizo un repaso por las principales inquietudes que los empresarios de la ciudad le transmitieron durante su encuentro en el Gómez Tortosa.
El Presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, visitó el lunes Novelda para participar en el homenaje a Salvador Sánchez y para reunirse con el tejido empresarial de la ciudad con el objetivo de conocer de primera mano sus inquietudes de cara al futuro. Después de esa reunión pasó por las instalaciones de Novelda Digital, donde tuvimos la oportunidad de analizar el resultado de este encuentro.
Para Puig es una «alegría» poder constatar «una vez más el dinamismo del tejido empresarial de Novelda en todos los sectores». Para él, esto es la base fundamental por la que «se puede construir, avanzar y desarrollar desde la innovación y políticas de calidad». En esta línea, el Presidente valenciano destacó la importancia de muchas de las empresas de la ciudad que «han conseguido internacionalizarse incluso en los momentos más profundos de la crisis económica, lo que supone un gran ejemplo».
Desde el gobierno valenciano quieren apostar por esta materia, «contribuyendo a través de la Agencia de Innovación para mejorar el producto y avanzar para propiciar la capacidad de internacionalización de todas las empresas». Y es que, según explicaba a Novelda Digital, «los empresarios de Novelda me han transmitido lo que yo creo que es lógico, que necesitan que la administración esté a su lado para resolver sus problemas y les ayude a abrir nuevas líneas de reindustrialización».
Y dentro de esta política de reindustrialización se encuentra el Corredor Mediterráneo, «una infraestructura fundamental para España porque por aquí transcurren más del 50% de las exportaciones de España», según Puig, que apuntaba que, según diferentes estudios, la puesta en marcha de este Corredor supondría de 70 a 100 mil puestos de trabajo en la Comunidad Valenciana, lo que reduciría en un 25% el paro de la Comunitat. Por eso, continuaba, «no tiene ningún sentido que esté paralizado» y proponía que «exijamos juntos que el gobierno de España ponga todo su interés en el Corredor Mediterráneo».
Por otro lado, el sector de la agricultura sigue esperando la tan ansiada agua de calidad y a un precio asequible. En este tema, según Puig, hay que hablar en serio y evitar las «guerras del agua», que «solo han traído dolor y melancolía». Reprochaba al Partido Popular que, a pesar de gobernar en todas las instituciones durante la última legislatura, «no consiguieron finalizar el trasvase del Ebro ni ninguna solución milagrosa». Por eso, apuesta el President, «tenemos que ver de qué manera podemos encontrar fórmulas para que esté garantizada el agua en el Vinalopó». El próximo mes llegará a Novelda la consellera de Agricultura para explicar las medidas que adoptará el gobierno valenciano de ahora en adelante.
Es importante todo lo que dice nuestro presidente Ximo Puig, porque no tiene un pelo de tonto.
Lo de gobernar en todas las instituciones es normal pero no se que tiene que ver con el trasvase, como creo que QUIERE HACER VER este señor, para culpar del mal que sufre un pueblo, a un gobierno que no es de su partido, y él quedar como Dios; otra cosa es gobernar en todas las comunidades y no hacer lo que se debe, con tal de no quedar mal con sus paisanos por darle el agua a los de otra casa. Ya veremos de aquí a cuatro años lo que pasa. Cuando llegue el momento, habrá que mirar atrás, analizar resultados de lo hablado en esta visita y ser consecuentes; si tenemos agua del Ebro, renovarle el contrato por otros cuatro años más, y si no la hay del Ebro ni de Valencia (pero de la buena) a la calle para siempre.
En cuanto a la visita de la señora consellera con sus planes, esperemos que traiga un proyecto redactado y revisado como Dios manda, listo para ejecutar, y no solo una declaración de buenas INTENCIONES como suelen hacer todos los políticos de alto rango. Recordemos al señor Rajoi cuando peleaba por la presidencia del gobierno, criticó al señor Zapatero por no trasvasar del Ebro optando por las desoladoras y al final él (el señor Rajoi) lo único que hizo fue embaucar al pueblo con la solución del Ebro, porque al final… agua de borrajas.