La empresa, en consenso con el Ayuntamiento, se ha comprometido a donar voluntariamente el equivalente a su valor en árboles de especies autóctonas para compensar la falta de este ejemplar y plantarlas próximamente en el municipio
Este martes, Mercadona ha decidido, en consenso con el Ayuntamiento de Novelda, talar el pino ubicado en la parcela donde construirán su próximo supermercado, frente al campo de fútbol de La Magdalena. Desde la empresa indican que tras conocer los resultados de los informes técnicos han decidido tomar esta decisión de común acuerdo con el Ayuntamiento, ya que era la única posible.
Los documentos reflejan un riesgo de caída al estar dañado y al dejar el ejemplar a la intemperie, ya que una vez se construya la infraestructura, el árbol quedaría en la zona del parking, desprotegido ante fuertes rachas de viento. Hasta ahora había estado protegido por las naves existentes anteriormente.
Antes de tomar esta acción, la empresa estuvo barajando trasplantar el pino, sin embargo la viabilidad y supervivencia del mismo no se garantizaba al 100%.
Para compensar de algún modo la pérdida de este árbol, aunque no existe obligación legal al no tratarse de una especie protegida y encontrarse en una parcela privada, Mercadona ha pedido al consistorio noveldense que hiciese una valoración del mismo y se ha comprometido a realizar una donación al vivero municipal de árboles autóctonos de la zona por el valor del pino talado y según la Norma Granada, donde realiza una valoración de árboles de interés paisajístico.
Un gesto que desde el Ayuntamiento han valorado positivamente, tal y como manifestaba la edil del área Lourdes Abad. Aunque el consistorio se muestre en contra de la tala de árboles, agradecen el interés que ha mostrado en este caso la empresa y esperarán hasta la época idónea para plantar los nuevos árboles en el municipio, que será a partir de septiembre.
Por su parte, Francisco José Martínez García, conocido vecino de Novelda y defensor de mantener el pino, explicaba que cree necesario que se endurezca la normativa municipal para que no permitan a las empresas poder decidir sobre los elementos paisajísticos. Además, consideraba insuficiente el esfuerzo realizado por la empresa a la hora de mantener con vida este pino de más de 50 años.
