El pasado martes se realizó una reunión informativa con agricultores para explicar en qué consistirá este acto de protesta que además contará con el apoyo de numerosas entidades del sector y de ayuntamientos
Este martes, la cooperativa del campo Santa María Magdalena de Novelda acogió la reunión informativa donde se explicaba la situación actual del sector y las medidas a tomar, en protesta por los problemas con la uva y el cultivo, por parte de ASAJA, La Unión, COAG, la Federación de Exportadores de Uva, el Consejo Regulador de Uva de Mesa Embolsada del Vinalopó, las cooperativas agroalimentarias y los ayuntamientos del Medio Vinalopó y Agost.
Ramón Espinosa, secretario provincial de ASAJA Alicante, junto a Pedro Rubira, presidente de ASAJA Novelda, animaba a los agricultores que asistieron a la reunión a participar en el próximo acto de protesta programado para el 25 de febrero a las 12:00 horas que tendrá como punto de encuentro la rotonda de Agrosum en la carretera de Monforte del Cid y Agost.
Pero para los que deseen asistir con tractores, furgonetas, turismos o cualquier tipo de vehículo, podrán encontrarse a las 11:00 horas en el polígono del Fondonet de Novelda. De ahí irán todos hasta el punto de encuentro donde se intentará cortar la autovía como se está haciendo en otras partes de España. De hecho, la idea es imitar las grandes manifestaciones que están teniendo lugar y que se iniciaron a finales de enero, siendo la del 29 de enero la más sonada en Don Benito (Badajoz). El lema de la manifestación: Precios y seguros justos para la uva de mesa, sin agricultura nuestros pueblos se hunden.
Tras el acto, se leerá un manifiesto con una tabla reivindicativa con todas las solicitudes y mejoras que se piden por parte del sector de uva de mesa del Vinalopó. Aquellos que estén interesados en participar en la tractorada, podrán dejar el número de la matrícula del vehículo a Pedro Rubira o bien en la cooperativa de Novelda.
Durante la reunión informativa, también se resumió las tres líneas en las que está trabajando el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, que se enfocan en la Ley de cadena alimentaria; los seguros agrarios; y las cotizaciones para compensar la subida del salario mínimo interprofesional.
En el caso de la Ley de cadena alimentaria, según relataba Espinosa, “se está intentando plasmar y establecer una ley similar a la de Francia en el año 2018 para establecer una relación de costes mínimos de cada producto e impedir la venta a pérdidas”. Sobre el seguro agrario, añadía que cuando vino la crisis el Ministerio de Agricultura disminuyó del presupuesto los 300 millones de euros destinados a seguros agrarios dejándolo en 200 millones. En 2013 esta cantidad se aumentó a 211 millones de euros y la idea es que el Ministerio de Agricultura vuelva a los 300 millones de euros. “El problema es que se tiene que aprobar por presupuestos generales del estado, que no están aprobados. La propuesta es inyectar dinero vía presupuestos generales del estadio en ENESA (Entidad Estatal de Seguros Agrarios)”.
Otros temas de trabajo que el organismo estatal lleva en mente están relacionados con los costes de producción, los costes de los plásticos, fertilizantes y gasóleo, además de la situación del cultivo español en Europa, donde tienen preferencia otros países fuera de la Unión Europea antes que España.
Espinosa también sacó a relucir el encuentro que mantuvieron con la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, donde anunció las inversiones en regadío para comunidades de regantes y para agricultores individuales y la potenciación del IVIA (Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias) en temas de plagas y nuevas variedades, donde sería interesante tener una variedad de apirena sin royalty. Una medida que Espinosa definía interesante para tener alguna variedad sin perder el cultivo tradicional.