La replaceta de la Aurora se convierte como es tradición en el escenario de bendición a todas las mascotas a las que sus dueños quisieron darle este gesto por San Antón, patrón de los animales domésticos que los resguarda bajo su protección, y que se celebra cada 17 de enero
Esta festividad se remonta a creencias populares. Antiguamente la fuerza de trabajo animal era básica para la supervivencia de la gente, pues de ellos dependía el éxito de sus cosechas. Se empezó a creer en que la bendición de San Antón garantizaba de alguna forma la fertilidad y la protección de dueños y animales.
Y hasta el día de hoy. Por esta razón, y como es ya tradición, la plaza de la Aurora, junto a la Iglesia de San Pedro Apóstol, acogió ayer a las 18:00 h. la bendición de animales, en su mayoría perros, a cargo del párroco Francisco Rayos, pero también hemos podido ver periquitos, gatos y conejos.