La parroquia de San Pedro acoge un solemne acto litúrgico en recuerdo de los cofrades fallecidos de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Agonía.
En un ambiente de recogimiento y solemnidad, la parroquia de San Pedro ha sido escenario en la tarde del Miércoles Santo de la tradicional Misa en intención de los cofrades difuntos de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Agonía. El acto, uno de los más esperados por los fieles y devotos, fue presidido por la imagen titular del Cristo de la Agonía en el altar mayor.
La celebración litúrgica, oficiada por el vicario Pablo Cremades, contó con la participación del presidente de la Cofradía, Fernando Baus, así como de numerosos miembros y devotos de la hermandad. La eucaristía fue acompañada por las delicadas notas del conjunto de cuerda Spicatto, que ofreció una cuidada selección de música sacra que reforzó la espiritualidad del momento.
Al término de la misa, Chema Soria, miembro de la cofradía, dirigió unas palabras de agradecimiento y reflexión a los presentes. “Es el momento de agradecer a Nuestro Dios por este acto solemne y blindado que nos acaba de ofrecer”, expresó emocionado. Soria también dedicó unas palabras a los fundadores y cofrades fallecidos, recordando su legado, así como a quienes actualmente mantienen viva la fe y el compromiso con la Cofradía. “Cada persona que nos acompaña pone gratuidad para que esta celebración sea más solemne”, añadió.
Como es tradición, los fieles participaron con devoción en el acto del besapiés al Cristo de la Agonía, acercándose al altar en silencio para rendir homenaje a la sagrada imagen.
El acto culminó con el traslado solemne del Cristo desde el altar hasta sus andas procesionales, en lo que se conoce como la “entronización”, realizada por un grupo de anderos. La imagen ya se encuentra dispuesta para presidir la procesión del Jueves Santo, uno de los momentos más esperados de la Semana Santa local.