La sesión plenaria de noviembre aprobó el primer paso para la resolución de este contrato por «incumplimiento» por parte de la empresa adjudicataria. Un trámite que se ha demorado 7 años en el tiempo desde el cierre de estas instalaciones.
La sesión comenzó con el debate de una resolución presentada por Guanyar Novelda para la modificación de la Ordenanza de regulación de las Tarjetas de Aparcamiento para personas con movilidad o visibilidad reducida. En el texto aseguran que «hemos observado fallos o carencias que nos han hecho llegar los propios afectados en la ordenanza municipal», por lo que su intención es «facilitar los trámites administrativos» para quienes soliciten una de estas plazas de aparcamiento y mejorar el texto que ya estaba aprobado y que contó en su día con la unanimidad de los grupos políticos. A pesar de todo, «queremos rendondear el texto original y que estas plazas tengan su función real». La oposición mostró su apoyo a la propuesta, al igual que el equipo de gobierno, que presentó algunos cambios más detectados por los propios técnicos municipales.
El siguiente punto trató la asignación de productividades al personal del Ayuntamiento. Compromís per Novelda y PSOE aportaron una enmienda para que se cree una comisión de control encargada de fiscalizar la asignación de estas productividades. El alcalde, Armando Esteve, explicaba que el texto es el que pasó por la mesa de negociación con los sindicatos, por lo que «nos tenemos que ceñir a lo aprobado junto con los sindicatos», aclarando que la propuesta que se recoge en la enmienda llega del representante de uno de los sindicatos a título personal, algo que le sirvió la crítica del partido socialista, acusándole de una «nefasta política de personal en el Ayuntamiento». Quedó aprobado con la abstención de la oposición.
Durante el pleno se inició también el expediente de resolución del contrato de concesión del Centro de Salud y Agua de Novelda, como ya anunció el equipo de gobierno hace unos días. Desde Compromís per Novelda les reprochaban que «habla mucho del pasado pero de la mala gestión de sus socios de gobierno no dicen nada», recordando que firmaron con la empresa concesionaria el compromiso del consistorio de abonar 80 mil euros anuales a cambio de la reserva de horas para asociaciones, lo que suponía más de dos millones de euros durante los 35 años de duración de la concesión. El portavoz socialista, Fran Martínez, pidió al secretario que leyera el informe que recoge todo lo que ha ocurrido con este centro desde su creación, remarcando que «solo 3 de los 15 puntos que se recogen pertenecen a la gestión del tripartito». Martínez reprochó al equipo de gobierno que «siempre actúan con medias verdades» y recordó que «esta es otra más de las obras faraónicas marca PP de la Comunidad Valenciana», ya que «nació viciado» porque «se necesitan 1.500 usuarios para que sea viable, algo que es imposible en esta ciudad». El portavoz del PP, Rafa Sáez, defendió que «el centro no le ha costado ni un solo euro al Ayuntamiento, y los terrenos han vuelto ahora a nosotros». Desde UPyD, Ricardo Moreno insistía en que «nosotros hemos hecho lo único que teníamos que hacer, resolver este contrato, y no esperar hasta el final de la concesión». Además, el alcalde defendía que «en todas las ciudades en las que se han cerrado este tipo de centros, el Ayuntamiento ha actuado de forma inmediata, impidiendo que entrasen los vándalos», reprochando que «no hacerlo ha tenido muchas consecuencias que ahora estamos pagando». A pesar del cruce de acusaciones, quedó aprobado por unanimidad.
Mociones
El PSOE presentó una moción aprobada por el parlamento valenciano (consensuado entre todos los partidos) para pedir al gobierno central que solucione el tema de la infrafinanciación de la Comunidad Valenciana. Contó con el apoyo de todos los grupos. También presentaron una para pedir más transparencia en la agenda del alcalde, así como el coste que supone, con un apartado en la web del Ayuntamiento. Desde Compromís recordaron que esta propuesta ya se había aprobado el año pasado a petición de su grupo a finales del año pasado, por lo que pedía que se tengan en cuenta los acuerdos de pleno. El equipo de gobierno apoyó la propuesta, aunque reconocían que «últimamente hemos reducido mucho los viajes a cargo del Ayuntamiento».
El equipo de gobierno presentó dos mociones consensuada con todos los grupos. La primera sobre la importancia del pacto de Estado para la lucha contra la Violencia de Género. La segunda, de la Federación Española de Municipios y Provincias, para solicitar un cambio en el techo de gasto que se establece para los ayuntamientos y una mejora en la seguridad a través de la Policía Local.
Compromís per Novelda pidió a través de una moción que solicitara la retirada por parte del gobierno español de un recurso a las leyes de Función Social de Vivienda y contra la Pobreza Energética, que se interpuso por «un ataque a las funciones del Estado», según el Consejo de Ministros. No obtuvo el apoyo del equipo de gobierno para su debate.
Preguntas de la oposición
Compromís per Novelda preguntó al alcalde por qué no quiso hablar de los problemas de la Comunidad Valenciana durante el acto del 9 de octubre, a lo que respondió que «para mí defender la soberanía nacional de los valencianos, que está siendo liquidada en estos días, era lo prioritario ese discurso». También le reprocharon que no utilizó el valenciano en su discurso, y Esteve señaló que «no me van a obligar a utilizar una lengua u otra, ya que es una decisión mía». La portavoz de Compromís, Silvia Anna, le recordó que «usted estaba representando a todos los noveldenses, y lo que hizo ese día es una gran falta de respeto».