Una pequeña fuga en uno de los manguitos de conducción del endurecedor de resinas de la instalación de N4 de la empresa local Levantina y Asociados de Minerales, obligó en la tarde de ayer a desalojar a los trabajadores que se encontraban en dicha planta. Al lugar se desplazaron una unidad de los bomberos de Elda y la Guardia Civil de Novelda.
La empresa descarta que se trate de un hecho de gravedad y ha pedido que no cunda el pánico. Al parecer, una pequeña fuga en uno de los manguitos de conducción situado en el endurecedor de resinas de la instalación de N4 de Levantina y Asociados de Minerales, provocó la salida de vapores tóxicos, motivo por el cual tuvieron que ser desalojados los trabajadores de la planta. Ante un eventual riesgo, el servicio de Prevención de Riesgos Laborales de Levantina activó un estricto protocolo de seguridad y el consecuente plan de emergencia, que funcionó convenientemente, como explicaban desde la empresa.
Hacia las 16 h., una unidad del cuerpo de bomberos de Elda y la Guardia Civil de Novelda se personaron en las instalaciones de la firma noveldense. Al poco tiempo consideraron que el motivo de la alarma había quedado extinguido y el trabajo en Levantina volvió a la normalidad.