Vivimos momentos de angustia por la cerrazón de los políticos, que no entienden su cometido cuál es, el mejorar la vida de los ciudadanos que los eligieron y no despilfarrar su tiempo en cuitas internas que no llevan a nada bueno, y más teniendo en cuenta nuestra historia. Todo ello me lleva a escribir unas letras armoniosas sobre lo que debe ser la esencia de la vida y nuestro comportamiento como seres civilizados
LA MORAL
Debemos estar preocupados,
por tanto desamor y poco hablar,
y por ello estamos trastocando
nuestro bienestar y el orden social.
Para clarificar el camino, diré,
que la moral es la ciencia
que el espíritu tiene
para su buen caminar,
y todo lo que no se haga con estas miras
faltaremos al amor universal.
La convivencia humana se ve
llena de inmoralidad y aturdimiento,
porque no se piensa en el mañana
sino en el mismo yo material.
¿Por qué…
¿a dónde vamos a parar
con este gran desconcierto,
ha ensuciarse el espíritu,
y tener remordimientos?.
Cuánto más vale vivir la vida
con estimación y acierto,
poniendo por apoyo la moral
para que nuestro vivir sea más armonioso
y más sano, y sin remordimientos.
La vida debe ser un proyecto
de entendimiento mutuo,
y no de un arremeter abyecto,
porque de ser así
el daño sería perpetuo
Por eso debe sentirse en el alma
la calidez del camino
y así evitar los tropiezos
de un devenir viperino.
Debemos trazar los proyectos
recopilando buenas maneras,
para conseguir los mismos efectos,
que las flores en primavera.
Ellas dan un perfume tan sagrado
y tan penetrante
que nada lo puede igualar
por eso dulcifica los corazones
y la razón puede dar paz.
Hagamos las cosas con gran paz,
porque el que conoce este perfume
tiene mayor responsabilidad,
de hacer las cosas bien
y a sus semejantes amar
y así consolidar la existencia
que tenemos que deliberar.
Paz y concordia sentiremos
y también orientación y verdad
porque la semilla del bien
a de progresar sin cesar,
y así todos la veremos brotar.
porque son las puras esencias
de nuestro Padre Celestial.
Estimado José Penal va Navarro, tú y yo nos concemos hace ya muchos años ambos jubilados y con canas.
Tú tomastes libremente defender una ideología y yo otra, primas hermanas en lo tocante en la ética y moral cristiana, al final del camino se refleja tu decisión muy legítima y as optado por » por un reino en el más allá» y yo por » un reino en el más acá»; una diferencia que algunos calificarán ; son matices, puntos de vista etc. a unas creencias que son vitales para comprender tus primer párrafo «momentos de angustia por la cerrazón de los políticos (en plural) Querido José somos prisioneros de nuestras decisiones y unos quieren disfrazar la historia y otros como yo con mucha torpeza queremos cambiarla para que el reino sea terrenal
Saludos cariñosos de este pensionista insolente