LOS QUE IBAN A GENERAR CONFIANZA
Mariano Rajoy compareció, el día 10 de junio, en la Moncloa, en una rueda de prensa que será recordada como una de sus mayores metidas de pata políticas; sólo comparables a las del nuestro ya ínclito Zapatero, que sobre el año 2008 prohibía que se hablase de crisis económica. ¿Recuerdan? «Desaceleración, enfriamiento, ralentización».
En su memorable intervención, el Sr. Rajoy, nos regaló perlas como que el rescate parcial de nuestro sistema financiero no era tal sino que es «la disposición de una línea de crédito sin contrapartidas». Vamos, cómo si el dinero cayese de los árboles… Además nos dijo que ese crédito «no generará más déficit público». Lo que tiene su aquel, teniendo en cuenta que el receptor del mismo es el Estado a través del FROB. Luego sentenció —y se quedó tan ancho— que «las reformas adoptadas por su Ejecutivo han evitado la intervención en toda regla del Reino de España». Para rematarlo todo con que él no había sido presionado por la troika, sino que «soy yo el que presionado a Europa». ¡Ahí es nada!
Pero solo unos días antes, el 28 de Mayo, la vicepresidenta, el ministro de Economía y el de Industria declaraban, una y otra vez, que la banca española no sería rescatada. El 8 de junio (¡solo dos días antes!) se nos dijo de que las decisiones se tomarían cuando las auditorías independientes valorasen las entidades financieras. El día diez estábamos intervenidos… Todo un prodigio de coordinación y comunicación.
Pero ya “resuelto” el problema —el mayor debacle financiero y económico de la historia de España— nuestro presidente enfiló directamente para Polonia a disfrutar del primer partido de la Roja en la Eurocopa…
Pero es que, además, todo esto vino después de rectificaciones políticas y técnicas que comenzaron con el Real Decreto Ley de 30 de diciembre, incumplimientos masivos de compromisos pre y post electorales, (ya nos lo advirtió: él iba a incumplir su palabra si era preciso hacerlo en atención a los intereses generales), una gestión desastrosa de los Presupuestos de 2012, la nacionalización de Bankia, que ha contaminado por entero al sistema bancario español, una inútil segunda vuelta de la reforma financiera, una reforma laboral con resultados desastrosos.
Recortan pensiones, derechos laborales, introducen el copago en sanidad, recortan becas, en educación, en investigación, etc. Se suben impuestos. Se malvenden las pocas empresas nacionales que quedan en este país, etc. Pero no recortan dónde hay que hacerlo. No reforman las estructuras del estado. No reforman la administración pública. No eliminan duplicidades. Se apropian de ideas de otros, como la fusión de ayuntamientos, pero ni siquiera las llevan a cabo. No eliminan el senado, sede del poder legislativo, pero que nadie sabe aún para que sirve. No recortan en sueldos y cargos políticos, casi 440.000 políticos viven a expensas de nuestros impuestos. No hacen una reforma en profundidad en las 17 satrapías autonómicas, con sus 17 correspondientes sátrapas y cortejos de políticos de pacotilla, que han arruinado nuestras pensiones, nuestra sanidad, nuestra educación, nuestros derechos laborales. No depuran, ni lo harán jamás, responsabilidades penales contra los máximos responsables de las cajas (todos ellos políticos a dedo, puestos por los partidos en el poder).
Ni Rajoy ni José Luis Rodríguez Zapatero. Ni PP, ni PSOE. No hay manera… Mientras algunos otros, disfrazados de izquierda —izquierda indefinida o sentimental—, apelan a particularismos identitarios (BLOC, Esquerra, etc.) para hacerse así con su propio cortijo político privado (aumentando exponencialmente el número de chupópteros políticos). También nos dicen que nos iría mejor solos -sin Madrid— lo que tendría su gracia, teniendo en cuenta que un país como el nuestro, con 47 millones de habitantes y un billón de euros de PIB, es presa fácil para los mercados internaciones y el capital. Imagine usted, oiga, donde acabaría Valencia por sí sola… Para que estos sujetos tengan su parcela de poder y manejen (se unten de) presupuestos públicos y se sientan “realizados” identitariamente con sus Castellers, Sevillanas, Herri egunas, Muñeiras, etc. muchos, sobre todo los trabajadores y sectores más desfavorecidos, tendrán que pagarlo.
Nos quedan pocas alternativas, Yo, sinceramente, espero que UPyD contribuya a la solución a todo esto. Porque no todo van a ser “herencias” …El PP ha cometido errores que han empeorado la situación española. Hay cosas que no por repetirlas son más ciertas. Las crisis siguen siendo crisis, aunque las llamemos “desaceleraciones”. Y los rescates, me temo, siguen siendo eso: rescates. Los llamemos como queramos llamarlos.
Pues tiene usted razón en casi todo, por otra parte, como casi todos también. Pero dígame usted, por favor. ¿Acaso no buscan ustedes quitar a los que hay para ponerse ustedes mismos?
Es muy fácil regalar oídos D. Ricardo, pero , oiga, que están ustedes peleando por ganar votos, no lo olvidemos.
Si me cuenta usted todo el principio tan cargado de razón no me lo estropee haciéndome creer que con someter el estado de autonomías se soluciona todo, que me recuerda usted a Rajoy y a Zapatero en el dispersamiento de motivos.
Porque ustedes de cambiar la postura con respecto al sistema financiero y monetario nada ¿No? Se seguirán patrocinando de la misma teta, esa que pagamos todos y que no está costando presente y futuro. No se, tanta indefinición en este discurso como en los dos que usted nombra al principio.
Un saludo muy empático, no crea usted.
Es vergonzosa la situación social, económica y financiera de nuestro país.CADA DÍA QUE PASA SOMOS MÁS POBRES, AUMENTA EL PARO Y LA INMIGRACIÓN MASIVA LOS DOS GRANDES PROBLEMAS QUE TENDRÁN QUE LIDIAR NUESTROS HIJOS. LA SOLUCIÓN PASA POR APOYAR
A LOS ESPAÑOLES COMO SITUACIÓN DE PRIORIDAD ADQUIRIDA, Y CAMBIAR LA LEY EXTRANJERÍA, CON CONTROLES MIGRATORIOS Y UNA REGULACIÓN DE CONTRATACIÓN EN
ORIGEN. TODO NO VALE, AQUÍ NADIE GENERA CONFIANZA….