ABRÓCHENSE LOS CINTURONES
Si un Clásico paraliza un país, cuatro directamente lo drogan. Y no es broma. Copa del Rey, Liga y Champions League, prometen, en dieciocho días, inyectarnos un estímulo que rara vez por medios naturales se consigue. Los dos mejores equipos de Europa, y cabe que del mundo, frente a frente en un todo o nada. Lo nunca visto. Jamás Barça y Madrid habían brindado al aficionado balompédico cuatro cruces que pudieran sentenciar al menos tres títulos. Quizá sea por ese subidón psicotrópico, que el renunciante Zapatero, culé y orgulloso hasta las trancas de serlo, haya espetado: “España es un poderoso transatlántico”. O sea, que tranquilos. Que como le de al Barça por ganar los cuatro infartos de abril y no digamos ya por llevarse al huerto otra vez el triplete, veo al presidente lanzándose a discutirle a la mismísima Merkel las excelencias del patio económico español, “muy por encima del alemán”, dirá. Y si se tercia, hasta a Obama. El fútbol tiene estas cosas. Que no se precisa de estupefacientes para flipar. Y más si ya se ha dicho aquello de “chao bambino”. Hasta una candidata del Partido Democrático de Ciudadella, para que vean, en Menorca, diríase que se haya visto afectada por la fiebre del esférico al presentar como reclamo electoral sus dos excelencias, democráticamente sensuales, con la tonalidad ya de un sol de caramelo y dominadas desde atrás por unas fornidas manos masculinas, que dejan asomar, entre los dedos índice y corazón, la razón de sus dos pezones para el voto. Lo cierto es que la campaña ha sido retirada en un hipo. Hasta ahí hemos llegado. Fútbol y política. Política y fútbol. Como concentrados por la magia de un azar caprichoso en los dos meses del año que más sacuden (y aturden) las hormonas. Pero a lo que vamos. Que en abril toca fútbol. Y del que enciende. Las urnas, luego.
El Madrid busca olvidar sus años de ostracismo en las primeras páginas de los diarios deportivos. De las “mollares” inversiones, a las más sonadas hecatombes. Así ha sido. Los futbolistas de mayor relumbrón han pasado por la “casa blanca”, a golpe de talonario. Pero unos jóvenes nacidos al calor de la Masía han ido desarrollando un lenguaje único y vibrante, al modo de una jerga secreta cuyas combinaciones nadie conoce, desposeyéndoles a aquéllos del euro con que fueron fabricados. Sin embargo, ahora parece que el Madrid ha cambiado cierta fisonomía que deja entrever esperanza en sus seguidores. Mourinho, ese sargento medio cabrón con corazón de niño, ha conseguido hilvanar un conjunto que se orquesta entre la calidad, la solidez y el sacrificio. Un proyecto grabado con el cuño del luso, incluida su altanería estratégica que tantos titulares regala al noticiero vacío. Enfrente, Guardiola. Todo lo ha conseguido, siendo más joven que nadie. De la elegancia y la prudencia ha escrito un libro de despliegue psicológico que atrapa y seduce al futbolista. El arte alrededor de un balón como quizás sólo la Brasil del Naranjito o el Milán de los ochenta practicaran en unos tiempos que dejaron muchas retinas nostálgicas suplicando algo parecido.
También Ronaldo y Messi se juegan lo suyo. El portugués necesita imperiosamente un golpe de efecto que lo vea todo el mundo, que hasta reverbere y agite la arena en la África más profunda, allí donde el fútbol es un cuento inalcanzable. Jamás le ha marcado un gol al Barça, ni vestido de Manchester; y siendo un futbolista atlética y técnicamente casi insuperable, sigue viendo cada noche en sueños alterados al renacuajo culé en películas de miedo con un quiebro imposible o en un gol atravesando una muralla de rivales gigantes. Puede matar dos pájaros de un tiro, si marca, Ronaldo…, y si queda por encima de Messi. Pero el argentino, como apuntó Pep, reviste el tipo de esos prototipos diseñados para que vean la luz cada cincuenta o cien años y borrar de la faz de la historia futbolística, casi sin toser, cuánto de hermoso hicieron otros antes. Porque Messi es el superdotado, con aire inocente, que no precisa de tratamientos especiales ni que eleva el ego ante al aplauso. Ambos se admiran, a pesar de las diferencias. Sabedores de que el destino los ha cruzado en un tiempo de la Historia, único, para que diluciden quién de los dos es el mejor jugador del mundo. Empieza la fiesta. Mourinho, Pep. Ronaldo, Messi. En dieciocho días.
Si su equipo pierde, en todo caso, piense aquello del transatlántico. O en la de la tetas. Verá que no es tan grave.
Que bueno tu artículo y que oportuno. Yo, como buen culé y que presumo de serlo, quiero machacar las cuatro veces a los de la meseta.Y si fueran más,mejor. No soy hipócrita. Escribo lo que pienso, no quiero ser políticamente correcto. Soy vehemente, y donde más se demuestra es en el fútbol.
Ahora, amigos, lo que pase, no lo sé. Expreso sólo un deseo. No soy Rapel. Ojalá pase lo que deseo, pero el Madrid, mal que me pese, es mucho Madrid y no se puede ningunear. Si ocurre, seré el primero con el cachondeíto, pero si no, aceptaré de buen grado lo contrario.
Y tenemos que agradecer a mi Barça y al Madrid que nos distraigan. Que nos hagan olvidar la lamentable política y la desastrosa economía que sufrimos. Que por unos momentos, cuatro veces en un mes, olvidemos nuestras miserias y miremos el fútbol. Y esto, ¿sabeis de quien es invento? Del franquismo y que nadie se moleste.
Así lo pienso y así lo expreso.Nada más.
Un beso, querido Claudio.
Yo no callo nada, señor inquisidor. Me asquea politizar hasta esto. Estoy convencidisimo de que el franquismo me perjudicó a mi y a mi familia mucho mas que a usted y la suya, porque mas, es imposible. Ni callo ni otorgo. Me asquea que conduzca a estas cosas un bello articulo de Claudio Rizo. Franco fue lamentable. Una desgracia para España. Como lo fueron muchos otros que acabaron con la Segunda República, pero desde dentro de ella. Se establece el 14 de Abril y a primeros de Mayo ya están ardiendo los primeros conventos e iglesias. Nuestra Historia tiene muchos Francos. Lea usted un poquito de historia, por favor. Hay muchos libros sobre aquello. Por eso, para mi, toda politica, de cualquier género, basura. Es usted malicioso. Si ese «presunto» le molesta tanto y no ha sido muy feliz, lo retiro. Y ahora a ver si usted se traga su mala disposición. Y puede tener las cosas de Don Luis, que no ve claras, así de transparentes. Más, el agua…Y quien no lo quiera ver, es un miserable…
A MATIZ: pero, ¿qué calla y qué otorga D. Luis?
¿Es posible que un artículo de los 4 enfrentamientos entre Barça y Madrid, traigan estos lodos?
Describo un recuerdo, maldita la hora en que lo hice, de épocas pasadas donde se utilizaba el fútbol para desviar la atención de otras cosas y se me ocurre compararlo, con toda la inocencia del mundo, en que estos enfrentamientos van a servir para que la gente olvide los problemas que realmente tenemos. Y cito al paro. Y se arma, la que se arma. Dios mío, ¿dónde hemos llegado?
Qué buen artículo, Claudio. Tiene todas las condiciones para serlo. Oportuno, ameno, fantásticamente orquestado, ingenioso, humorístico y muy bien escrito. Eso, en tí, «va de soi».
Relmente, se da una circunstancia casi planetaria, que diría la Pajin. Algo que jamás se produjo. Y que va a entretener a los españoles mas allá de tanta mierda.
Lamento disentir de ti en esta materia, cuando tanto coincidimos en muchas otras. Soy un madridista honrado, a quien no agrada la actual politica de su equipo. No se es el mejor porque se puede comprar a los mejores. Si eso pudiera ser así, el dinero sería el motor de todo en la sociedad. Y aun quedan el mérito, el amor y la dignidad. Ví ganar, en el Bernabeu, al Madrid, las cinco primeras y consecutivas Copas de Europa. Aquellas que los envidiosos catalanes atribuían al Caudillo. Como si en una España despreciada por todo el continente, hasta sin embajadores extranjeros, abandonada a su suerte y comiendo gracias a Perón, tuviera el presunto responsable de nuestro absoluto abandono exterior, tanta fuerza en Europa. Quien la tenía se llamaba Bernabeu. Al que debe el Barcelona que KUbala pudiera ver a su madre, a la que no dejaban salir de Hungría ni al él, desertor de aquello. Bernabeu, el gran embajador de España. Bernabeu y el mas grande Real Mafdrid de la historia. Que solo merecería respeto y admiración. Era lo único español que tenía prestigio fuera de nuestro pais. Como el que yo tengo al actual Barcelona, practicante del mejor futbol que han visto mis ojos y no debido a mercenarios que no lo pueden sentir como propio, sino, mayoritariamente, a los productos de su cantera prodigiosa, maravillosamente llevada. Yo admiro al Barcelona. Y quienes atribuian a la influencia y el poder de Franco aquellas primeras cinco Copas de Europa, eran además de memos, miserables. La puñetera envidia…Y Vichca, ( o como se diga) el gran Barsa actual…Le rindo todos los honores que merece.
Al hijo, Claudio, le digo que se acuerde tambén de ofrecerle algún artículo a los clubs valencianos (Valencia, Villarreal, Hercules, etc). Al padre, Wifredo, no le de usted méritos al franquismo que no ha tenido
Dice usted textualmente:
«Como si en una España despreciada por todo el continente, hasta sin embajadores extranjeros, abandonada a su suerte y comiendo gracias a Perón, tuviera el presunto responsable de nuestro absoluto abandono exterior, tanta fuerza en Europa».
Sr. Galbis, por favor, «presunto» responsable??? Franco «presunto» responsable. A estas alturas de la historia……..
De verdad que no entiendo y «me sorprende», pues le sigo en sus artículos semanales, el «respetuoso trato» que le ha dado a Franco, responsable de los 40 años de dictadura militar que sufrimos injustamente los españoles.
Excelente artículo Claudio, incluso para mí que no soy ni del Madrid ni del Barcelona.
Me gustaría recordar algo que siempre pesará en el orgullo de la afición del «equip de les corts»
El equipo formado por Ramallets, Basora, Kubala, César, Moreno, Manchón y otros necesitaba un recinto capaz de acoger toda la expectación que levantaba uno de los mejores conjuntos de Europa del momento. Poseedor de unos terrenos entre la Riera Blanca y la calle de la Maternidad, contemplados en las ordenanzas como zona urbanizable, el Barcelona planteó la necesidad de permutarlos por otros situados en la zona terminal de la Diagonal, reservados en los planes municipales para parques, jardines y zona deportiva. Antonio María Simarro, alcalde de la ciudad en 1951, y el presidente del Barça, Francisco Miró-Sans, acordaron la primera recalificación favorable al club.
Habría una segunda, que contó con la simpatía del gobernador civil Felipe Acedo Colunga, a quien Miró-Sans expresó públicamente su «más profundo agradecimiento» en una asamblea de socios, en 1955. Endeudado en más de 230 millones de pesetas, el club no tenía otra salida que vender Les Corts, considerado zona verde privada. Enrique Llaudet se entrevistó con el alcalde José María de Porcioles, solicitando recalificar esos terrenos. Se aprobó en el pleno municipal, y Porcioles fue nombrado soci d’honor por salvar la economía del Barça.
Habría una tercera recalificación, activada por el directivo Juan Gich ante Torcuato Fernández Miranda, aprobada por el Consejo de Ministros en 1965 y firmada, entre otros, por Francisco Franco, quien contribuyó así a evitar la quiebra azulgrana.
Y es que al fin y al cabo… la única chaqueta que le gusta vestir a los españoles… es la del dinero.
Venga venga dejemos lo del franquismo para otro hilo. Este artículo es un apreton de los que le gustan a un pillastre. ¿Como no vamos a cambiar la política por el futbol? ¿Crees que es posible soportar continuamente la hediondez?.
Solo por los comentarios a nuestros amigos del equipo rival vale la pena… ¿y lo que nos vamos a reir?
Te agradezco que hayas sido tan imparcial en tu buen artículo Claudio.
Del Madrid dices:
«El Madrid busca olvidar sus años de ostracismo»
«las “mollares” inversiones»
«las más sonadas hecatombes»
«a golpe de talonario»
«altanería estratégica»
Del Barsa:
«jóvenes nacidos al calor de la Masía»
«lenguaje único y vibrante»
«El arte alrededor de un balón»
Y más jejejej
¿Tu eres de Chamberí verdad?
Felicitaciones y un saludo
Francamente me siento incómodo si me atribuyen Uds. alguna simpatía o afinidad al franquismo. Si han leído comentarios míos, verán que estoy muy lejos. En las Antípodas.
Por lo visto, y lo lamento, no me he sabido explicar. Todos no tienen la clarividencia de Luis Beresaluze o de mi hijo.
Yo a Franco no le atribuyo nada, Dios me libre. He pretendido decir que el franquismo utilizó el fútbol para ocultar otras miserias. Y, ahora, le pese a quien le pese, estos 4 entrentamientos van a servir para que olvidemos, también, otras miserias. Entre ellas el azote del paro.
Pan y Circo, dice Matiz. Justo,a eso me refería. Circo lo hay asegurado, el pan ya es harina de otro costal (en sentido figurado, Matiz, que aquí hay que matizar mucho)
Espero haberme hecho entender, y por favor, no me atribuyan apología del franquismo. Nada más lejos de la realidad.
Pero, ¿A que viene ahora lo de Franco? no hay nada del presente que se pueda ni deba relacionar con el pasado, sobre todo con el pasado de Franco. Parece ser por lo que estoy viendo, que antaño D. Francisco ponía el fútbol para entretener y despistar al personal, y que quieren decir, ¿Que los de ahora hacen lo mismo? Vamos anda.
Sr. Rizo lo suyo está clarísimo, todos en Novelda le conocemos y su trayectoria personal le avala.
Ahora con el Sr. Galbis no lo tengo tan claro, D. Luis el que calla otorga???
Sr. Rizo, inventar algo Franco??? No le de ese mérito al franquismo y mucho menos a Franco.
Lo único que hizo ese dictador/tirano fue copiar a los romanos su conocido «pan y circo», potenciando el espectáculo del futbol, para ver si los españoles nos olvidabamos de que en España no se respetaban los derechos humanos, no había democracia ni libertad para las personas, en especial para las mujeres. Increible recordarlo!!!
Parece mentira que el asunto haya desbarrado de este modo.
En fin, 1-1. La Liga es del Barça.
El miércoles seguimos con Franco, en la final de Copa.
Cuando rizas el Rizo, Claudio, estás sembrado. Se llamaba una vez la Copa del Generalísimo. Y él, la entregaba. No pongo la serie de «jes», porque no me gusta.
Ahora si, D. Luis, retirado el «presunto», ya lo veo claro.
Un cordial saludo
No la conocí con ese nombre, Luis, yo sería aún un proyecto…, aunque sí he visto en la tele muchas veces esa entrega de Copa, que citas.
Gracias a todos, ché, lo he pasado bien. Casi tanto como anoche viendo el partido.
Y he disfrutado con la documentación histórica aportada por los dos «luises», Beresaluze y Mira. Un lujo.
Siempre se aprende, y se agradece, aunque a veces se generen tantos meandros del principal.