Artículo de opinión de Gonzalo Maluenda, Secretario de Relaciones Institucionales del PP de Novelda
Si hay alguna enseñanza práctica en todos esos libros que están hace ya algún tiempo de moda y que intentan ayudar o aconsejar a quien busca el éxito personal o profesional, es la certeza de que cuando uno alcanza el éxito no se puede dormir en los laureles y debe de continuar trabajando en pos de un éxito mayor. El establecerse metas cada vez más ambiciosas asegura que una organización está siempre viva y preparada para el trabajo. Asimismo, estos libros también nos advierten de que hay personas u organizaciones que sí pierden el éxito o pasa a manos de otros, suelen vivir experiencias traumáticas que pueden marcar su futuro personal o como organización.
Precisamente por todo esto, comenzamos este septiembre un curso político difícil y en el que el Partido Popular a nivel interno debe de demostrar la responsabilidad que se le supone en los distintos procesos domésticos y, a nivel externo, debe de luchar con todas sus fuerzas para alcanzar el gobierno de los distintos organismos para aplicar sus propuestas que son un seguro de incremento de bienestar y calidad de vida para los españoles en general y concretamente para los noveldenses.
Por un lado debemos empezar ya, de una vez por todas, a pisar el acelerador a fondo en cuanto a nuestra labor de oposición al gobierno local y sin olvidar que en la lejanía se empieza a divisar las próximas elecciones europeas en las que, como siempre, el Partido Popular de Novelda intentará aportar su granito de arena para que los españoles en general y los noveldenses en particular depositen su confianza en nuestros representantes. Todo esto aderezado con una denuncia constante durante este otoño cuando la palabra “crisis”, tan denostada por el ejecutivo Zapatero, se dará a conocer con más virulencia de la que hasta ahora nos ha demostrado, ayudada por algunas de las ridículas medidas tomadas desde el Ejecutivo central. Necesitamos medidas importantes y decididas que tengan mucho que ver con el control del gasto público corriente ante el previsible recorte en la capacidad recaudatoria de los distintos tributos. Medidas que garanticen la viabilidad futura del sistema de Seguridad Social. Necesitamos apuntalar la competitividad de nuestras empresas, necesitamos un clima de confianza económica y esto, no lo dudéis, no lo genera el nuevo gobierno de Zapatero.
La otra pendiente que debemos coronar este nuevo curso político está escrita en clave interna. Aquí, el éxito está más que conseguido por lo que debemos estar constantemente alerta para poder intuir cualquier cambio y poder adaptarnos perfectamente a lo que la sociedad nos demanda. En este sentido, por ejemplo hablo de Novelda, no dudéis que habrá gente, habrá personas, de aquí y de allí, que intentarán que perdamos el norte. Intentarán que perdamos la percepción de las variaciones de la sociedad y no dudarán en utilizar todas las artimañas posibles para desviar la atención de lo que realmente importa. Seguirán «erre que erre», seguirán equivocándose, seguirán metiendo la pata, seguirán pensando que tienen alguna fuerza con ese tipo de argumentos.
Mientras, la gente del Partido Popular a lo suyo, a seguir en la onda que le llevó a reventar las expectativas electorales en las pasadas elecciones generales donde, recuerdo, nuestro Presidente local era candidato. En los próximos congresos internos debemos de hacer las cosas con cabeza y refrendar el trabajo bien realizado con la continuidad de los equipos y directores con los lógicos pequeños retoques que ayuden a “avanzar en una dirección nueva ayuda a seguir encontrando un nuevo éxito”. Hay un refrán muy español que aconseja no tocar algo cuando funciona y en este caso no hay más que ver cuáles son los resultados de las últimas elecciones generales en la Comunidad, en la provincia o en Novelda para desear y necesitar la continuidad de Camps, Ripoll y Martínez al frente de las diferentes direcciones territoriales. Y justo detrás de ellos, todos los demás con un único fin de conseguir el tan ansiado bienestar de todos nuestros conciudadanos.
Si las fuerzas que los políticos empleais en estar unos pendientes de los otros, las utilizarais en observar y solucionar los problemas del pueblo, mejor nos iría a todos. Quizás es que, ninguno sabeis lo que hay que hacer, y nos entreteneis con debates absurdos e intrascendentes. A regocijaros en victorias ilusiorias, en caso del PP, o pírricas, en caso del PSOE, mientras quienes depositamos nuestra confianza en vosotros, o cualesquier partido minoritario, sufrimos la incompetencia supina de la clase política. No hay mejor escuela que la experiencia: si todo gobernante fuera mileurista aprendería a administrar el Estado en un santiamén. Es más difícil llegar a fin de mes con los sueldos y precios actuales que poner freno a la crisis desde arriba. Pero claro, sólo pensais en las siguientes elecciones. Estais los cuatro años de campaña, untandoos de maquillaje, con grandes palabras, para confundir al pueblo, que, al final y como siempre, es que el acaba pagando vuestra incompetencia. Es lo que hay.