Artículo de Vicente Díez sobre deportistas noveldenses
Hoy traigo la biografía de una muchacha que por su aspecto, parece menor que la edad que tiene. Nació en el año 2003 y fue la mayor de la parejita que tuvieron sus padres, Luismi y Rosa. Viven en el barrio de San Roque. Su colegio fue el Oratorio Festivo y actualmente está en el Instituto La Mola, de lleno en el Bachiller.
Su padre trabaja como mecánico en la empresa La Barraca y es aficionado desde siempre al motociclismo, por lo que el tema estrella en lo deportivo que oían los hijos era sobre motos de carreras. A veces la llevaba a ver pistas de karts y motos para niños y poco a poco, ella fue pidiendo tener una moto como las que veía, hasta que consiguió su ansiado regalo con motor. A continuación, hubo que equiparla, por lo que vendría el equipaje o mono y casco, guantes… en fin, un dineral para los padres.
Aún era una niña en edad escolar y no se decidió mucho a rodar en aquella pista, pues todos los usuarios eran chicos y niños, por lo que no se sentía atraída a esa pista hasta que cumplió los 15 años (2018). Hasta entonces, giraba el puño del acelerador por el campo y sendas.
Algo en su interior venía diciéndole que aquello era lo que le satisfacía, la moto y el ambiente motociclista. Consiguió la licencia federativa en el pasado año 2020 y de inmediato, acudió a cuantas carreras para amateurs se celebraban en esta Comunidad Autónoma, especialmente en la ciudad de Villena, donde parece haber más actividad que en ninguna otra.
Las diversas carreras en que participó otorgan una puntuación, según el puesto obtenido. Por tanto, quien más puntos sume será el campeón autonómico. He escrito «el campeón» y no «la», pues como es fácil suponer, casi era la única fémina participante. Pero el esfuerzo, así como el riesgo es el mismo que para los muchachos; no había concesión ni ventaja alguna para ella.
Acabó la temporada 2020 en cuarto lugar de la categoría PitBike de la Comunidad Valenciana; algo muy positivo para una debutante. En esta categoría, las motos no tienen cilindrada como las grandes. Su moto equivale a 16 caballos de vapor (H.P.), o 160 c.c. que es el máximo permitido. Posteriormente, están las motos con una cilindrada entre 16 y 20 H.P. y por último, las que rebasen los 20 H.P. ya no tienen límite. Su moto calcula que puede costar unos 2.000 €, lo que a mí me sorprendió por parecerme muy poco y dice que le sale gratis la mano de obra del mecánico (su padre) para reparar, poner a punto y revisar la moto. No así en lo referente a los repuestos.
Antes de la declaración del Covid-19, en Febrero compitió en Villena. Se arriesgó más de lo prudente en una de las últimas curvas para poder avanzar alguna posición y lo consiguió «por los pelos», según su versión. Debutó con el tercer puesto del podio. ¡Enhorabuena! Había una segunda prueba programada para Marzo, pero… vino un largo paréntesis de suspensiones y se reanudó en Agosto, en la ciudad de Chiva (Valencia), donde finalizó en cuarto lugar.
Volvió a Villena, parece ser como la ciudad motera por excelencia, a finales de Agosto para repetir el tercer lugar en la meta. En Septiembre la prueba se desarrolló en Albaida y de nuevo, a Villena en Octubre sobre un circuito recién asfaltado. Es admirable la afición y actividad que desarrolla Villena, donde hay algunas peñas motociclistas y diversos talleres, así como tiendas del ramo, lo que eleva el ambiente del motor.
A mitad de Noviembre, la prueba se trasladaría a La Cala de Finestrat con un tercer puesto y finalizando aquel mes, compitió en Oliva, con un cuarto lugar al bajar la bandera de cuadros.
Relata que también practica algo la bici, como preparación complementaria, pero sólo cuando dispone de tiempo libre. Suele acompañarla Sergio Amorós, uno de los monitores de la Unión Ciclista Novelda. Con la bici se hace bastante actividad cardiovascular y así se lo recomendaron. El gimnasio se precisa para conseguir fuerza, pues su moto pesa 70 kgs.
La empresa La Barraca ha sido siempre muy generosa con esta familia, pues aporta una furgoneta donde llevan las motos; la suya y la de su hermano Luismi, algunos años menor que ella y también comienza a practicar con su propia moto, aún sin competir. La moto de Marieta lleva adheridos al carenado, logotipos y dibujos de la empresa. Gracias eternas.
Dos veces semanales van a un circuito denominado Center Racing Silesias, entre San Fulgencio y La Marina. Allí coincide con otros muchachos, todos compañeros de la Escuela de Motociclistas. Entre éstos, recuerda los nombres de Adri; Marc; Javi y su propio hermano Luismi, todos ellos dirigidos y monitorizados por un alicantino, Emilio Trujeque, al que consideran más un amigo que un monitor o maestro. Les plantea ejercicios similares a situaciones de carrera, como adelantamientos con algo de riesgo; o bien, otro día practican la inclinación del cuerpo que hay que realizar en las curvas. Asimismo, tanto antes como después de la moto, hacen estiramientos musculares y acaban con algo de fatiga. La estancia suele durar unas 3 horas, con una parada para merendar. Y allí les llevan sus progenitores, pues a veces la furgo la ha conducido su madre.
En el capítulo de caídas, algo inevitable para quien comienza a montar en bici o moto, comenta que en un entrenamiento que hizo en Villena (y aquel día debutó su madre como conductora de la furgo), atravesó sobre un bache sin verlo bien y al no tener su peso la suspensión, «salió por las orejas de la moto» o dicho de otra forma, por encima del manillar; equivalente a saltar despedida por encima de las orejas del caballo en una película del Far West. Se mareó al levantarse y perdió algo el conocimiento, con rotura de la muñeca izquierda. Pasado el susto varios días después, quería de nuevo montar en moto. Recuerdo que el desaparecido campeón Ángel Nieto, aquel del “doce más uno” decía «…A caer se aprende cayendo».
En carrera prefiere no arriesgar y limitarse por ahora a lo que domina y conoce; ya tendrá tiempo de mejorar y arriesgar cuando adquiera más experiencia y eficacia. Ella es no sólo la única fémina en estas carreras, sino incluso a veces, la más joven de los participantes.
Recordando anécdotas de las carreras disputadas, la que más le gustó fue la de Albaida, pues iba en un grupo de cinco motociclistas con continuos adelantamientos unos sobre otros, u otra. Consiguió acabar segunda de este grupo, aunque habían llegado destacados otros dos motociclistas. Por contra, no guarda buen recuerdo de la carrera celebrada en Oliva, pues desconocía previamente el circuito y estaba mojado de lluvia en la noche previa. Lo de conocer el circuito se debe a que si llegan con tiempo suficiente, el monitor les acompaña dando una vuelta de marcha pedestre al recorrido, con parada y explicación técnica, si hay alguna curva con algo que mencionar o resaltar.
Cuando su moto pasa por las manos de papá, Marieta le observa y ayuda, algo beneficioso pues no sólo es darle al puño para que la moto vaya rápida, sino que hay que conocer su mecánica y funcionamiento. Sobre proyectos laborales para el futuro, está algo indecisa. Aunque sí quiere conseguir el título de monitora de motociclismo.
Por último, quiere agradecer su gran apoyo a la empresa La Barraca y especialmente al señor Ramón Moya. A su propia familia por su comprensión y unidad a su alrededor y asimismo, a su monitor, Emilio Trujeque. Sin ellos, sería imposible seguir adelante en categoría amateur, en un deporte como la moto o el automóvil, inasequibles para cualquier joven sin medios económicos propios.
Ánimo, Marieta: sigue adelante con tu ilusión, poniendo todo el interés y esfuerzo. A veces, los sueños se convierten en realidad.
Por fin, ya le tocaba a las motos. Aún le falta madurar a Marieta, pero es un ejemplo para el motociclismo.
Sigue adelante, hasta que te veamos en el Dakar. Tienes mérito.
FELICITACIONES PARA LA CAMPEONA Y SU PAPÁ. Y por supuesto una mención al Sr Ramon Moya (La Barraca) por su PATROCINO motivado por su pasión por la MOTO.
Qué bien. Un deporte nuevo como es la carrera de motos. Venga, Marie3ta. Ánimo y a vencer
Como siempre, mi agradecimiento a los lectores y más aún, a lo que aportan su opinión. A continuación, viene un artículo sobre un atleta veterano.