Hasta septiembre este año han acudido por primera vez 1.052 mujeres víctimas de violencia de género, 450 en la provincia de Alicante
La consellera Gabriela Bravo asegura que la red de centros «genera cauces de confianza» en las afectadas para ayudarlas a «poder salir del infierno»
Una media de seis mujeres víctimas de violencia de género han acudido por primera vez a recibir ayuda en la Red de Oficinas de la Generalitat de Asistencia a las Víctimas del Delito en este 2021. En concreto, un total de 1.052 víctimas han acudido por primera vez a uno de los 33 centros que la Conselleria de Justicia, Interior y Administración Pública tiene desplegados entre las tres provincias de la Comunitat Valenciana.
La consellera Gabriela Bravo ha revelado estos datos la víspera del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia de Género que se celebra, por mandato de la ONU, cada 25 de noviembre.
En este sentido, la consellera de Justicia ha recordado que la red de oficinas «forma parte del ecosistema de recursos que la Generalitat ha desplegado para generar en las víctimas cauces de confianza y que sientan que tienen a su disposición todas las medidas de atención y protección para poder salir del infierno en el que viven ellas y sus familias».
En el periodo comprendido entre enero y septiembre de este año, las oficinas atendieron, por primera vez, a un total de 1.569 personas por su condición de víctimas. De ellas, el 67% correspondían a víctimas de violencia de género que es la primera causa de asistencia en la red desde 2018.
En relación con la edad de las mujeres, casi un tercio se encuentra entre los 31 y 40 años y el 26 por ciento tiene entre 41 y 50. Más de la mitad de ellas tiene, además, hijos o hijas a su cargo.
Por provincias, la de Valencia es la que más víctimas ha atendido (650), seguida de Alicante (450) y Castellón (143).
«Ante estas cifras, -ha dicho la consellera- es una absoluta irresponsabilidad que haya quien aún considere la violencia de género como un problema privado, lo banalice o intente hacer comparaciones odiosas desde posiciones reaccionarias. La violencia de género es un problema de Estado y como tal hay que tratarlo. Por eso es necesario que todas las instituciones públicas y la sociedad civil trabajemos conjuntamente para erradicarlo», ha concluido.