Un tema como la alimentación, que tradicionalmente parecía ser de “sota, caballo y rey”, a día de hoy se encuentra sometido a toda clase de debates sobre la mayor o menor conveniencia de ingerir determinados alimentos.
Y es que los avances que han tenido lugar a lo largo de los últimos años en la materia han sido realmente importantes. Lo que sí queda patente es que resulta trascendental llevar una adecuada alimentación, para tener un buen estado de salud general a nivel físico y psicológico.
¿Cómo sería una alimentación equilibrada?
En conjunto, las distintas investigaciones han puesto de manifiesto que la dieta más adecuada es un concepto que varía en función de la cultura, los hábitos alimenticios, el estado de salud, los gustos, las costumbres, las creencias, la actividad física y el estilo de vida.
Es decir, no hay un tipo de dieta ideal para todo el mundo, aunque sí se puede extraer un criterio general sobre aquellos alimentos que se deben tomar a diario. En este sentido, cabe resaltar que una alimentación equilibrada es aquella en la que se incluye una diversidad suficiente de alimentos, en cantidades adecuadas, y en función de las características que presente la persona y su estilo de vida.
A veces el cuerpo necesita una ayuda extra
No obstante, el ritmo de vida actual no siempre permite que la dieta sea tan equilibrada como sería conveniente. Afortunadamente, a día de hoy existen diversos suplementos alimenticios que complementan la dieta para aportar al organismo aquellos nutrientes que necesita. En sitios online como HSN se puede acceder un amplio catálogo de estos suplementos.
Conviene que quede claro a qué se hace referencia a la hora de hablar de nutrientes. Estos son sustancias susceptibles de ser aprovechadas por el organismo, que posibilitan la vida y que están repartidas en los alimentos de forma desigual. Son las grasas, los hidratos de carbono, las proteínas, los minerales y las vitaminas.
Ya sabemos qué son los nutrientes, pero, ¿cuál es su función?
Pues bien, dichos nutrientes cumplen diferentes funciones. Una de ellas es obtener la energía necesaria para las funciones vitales, así como para el desarrollo general de la actividad del cuerpo. Además, forman y mantienen los órganos, tejidos y el sistema de defensas a salvo de infecciones y agentes externos. Y algo que también resulta de gran importancia: regulan los procesos del organismo para que estos se desarrollen con total armonía.
Uno de los ingredientes que necesita el organismo son las proteínas. Estas se dividen en proteínas completas, que son las de origen animal, y las incompletas, es decir, las proteínas de origen vegetal. Para aportar este nutriente al organismo en cantidad suficiente, se puede acudir a un aporte extra por ejemplo a través de proteínas como las de HSN.
Hay que tener presente que los nutrientes no se distribuyen entre los alimentos por igual. Es decir, cada alimento presenta una mayor o menor cantidad de nutrientes, lo cual ha llevado a clasificar estos en función de los nutrientes que contienen o de la función que desempeñan