La variedad sin pepitas podría ser realidad en unos años gracias al esfuerzo que pondrán en ello los agricultores de la comarca.
Novelda acogió en el mes de diciembre la reunión de fundación de la sectorial de la Uva de Mesa, un órgano que nació con el objetivo de defender los intereses económicos de los productores de uva del valle del Vinalopó.
Entre otros temas, esa primera reunión trató la posible creación de una variedad de uva sin pepitas, una demanda de los consumidores que podría ser una realidad en los próximos años. Pedro Rubira, presidente de esta sectorial, explicaba que “estamos sentando las bases para conseguir esta variedad, aunque habrá que analizar los resultados para ver si es rentable para el comercio”.
Según Rubira, “pasarán al menos cuatro o cinco años hasta que obtengamos los primeros resultados”, y una vez que los tengan tendrán que conseguir que las variedades sean de fácil cultivo. Todo esto, apuntaba el presidente de esta sectorial de la uva, “sin olvidar que tenemos una variedad única como es la Aledo”.
De momento han comenzado ya los trámites para que el Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) empiece en la elaboración de la variedad APIRENA, aunque sí queda claro que el proyecto es a largo plazo.