La otra cara de la Huelga General la ponen los empresarios. El sector del mármol ha sido el más movilizado por los sindicatos durante el 29-S, y los empresarios se quejan de la “coacción” que han sufrido algunos trabajadores que no querían hacer huelga y que se vieron obligados a ausentarse de sus puestos de trabajo.
Desde Mármol de Alicante aseguran que la formación de piquetes en las puertas de las fábricas de mármol de Novelda han tenido “una repercusión negativa” para los trabajadores que se han visto “coaccionados” por quiénes han secundado la huelga y no han permitido el acceso a los trabajadores a sus puestos de trabajo. No todos los empleados del sector estaban dispuestos a hacer huelga en la jornada de ayer, pero les fue imposible acceder a las fábricas.
Según explicaba a esta redacción Mariano de Juan, vice-presidente de la asociación y gerente de una empresa de mármol, días antes de la movilización hicieron un sondeo entre los trabajadores para conocer cuál iba a ser el grado de participación. De Juan asegura que eran bastantes los trabajadores dispuestos a cumplir con su jornada, pero los piquetes informativos que se concentraron en los accesos a fábricas y polígonos industriales “coaccionaron y amedrentaron a la gente”, impidiendo su entrada. En este sentido, el empresario reprocha esta actitud y alega que los trabajadores tienen el mismo derecho a hacer huelga que a trabajar.
No obstante, esta situación –aseguran- no ha afectado económicamente a las empresas del sector. Mariano de Juan incluso aseguraba que “si me hubieran dejado elegir hubiera cerrado la empresa. De esa forma hubiera ahorrado costes. Lo que pasa es que yo quiero respetar el derecho de mis empleados a trabajar”.
