Todos hemos oído en alguna ocasión esta famosa cita, “mente sana, cuerpo sano”, pero solo nos la tomábamos como una recomendación más. Sin embargo numerosos estudios confirman la veracidad de la cita y cada vez somos más conscientes de la importancia que tiene mantener nuestro cerebro sano y que guarda una estrecha relación con hábitos de vida saludable, eliminar el estrés de nuestras vidas y hacer ejercicios cerebrales para entrenar nuestras capacidades cognitivas.
Al igual que hacemos crucigramas o sudokus y nuestro cerebro notamos que responde y la agilidad cognitiva crece cuantos más hacemos, el deporte también influye para que nuestro cerebro responda y se mantenga en forma de la misma manera, ya que ambos están implicados en nuestro bienestar y calidad de vida. Apuntarnos a cualquier gimnasio para realizar fitness, senderismo o hacer bicicleta puede reportar a nuestra vida muchas satisfacciones. Muchos ponemos como excusa el ritmo que nos impone el trabajo y las obligaciones personales, pero sacar un tiempo para invertirlo en entrenar nuestro cuerpo y cerebro será una inversión para el futuro.
Incluso si no tenemos tiempo para elaborar todos los días una dieta que aporte los nutrientes necesarios para ejercitar ambos ejercicios, cerebrales y físicos, existe una amplia gama de productos nutricionales como los suplementos scitec nutrition, que aportará a nuestra dieta todas las vitaminas, minerales y proteínas que nuestro organismo demanda cuando practicamos deporte.
Practicar un deporte retroalimenta al mismo tiempo nuestro cerebro, influye en como pensamos y sentimos, favorece el aprendizaje y predispone un buen estado de ánimo, eliminando la ansiedad y el estrés, además de favorecer también nuestro sistema inmune. El ejercicio físico ayuda a que las conexiones neuronales aumenten, favoreciendo nuestra capacidad de aprendizaje, la memoria y facilitando la “neurogénesis”, que es la facultad del cerebro de crear nuevas neuronas.
Además según la comunidad científica, las personas que realizan algún tipo de deporte o actividad física, viven de media tres años más que quien lleva una vida sedentaria, además de tener una mejor calidad de vida y sufrir muchas menos patologías gracias a que su sistema inmunológico resiste mejor contra muchas enfermedades.