Este año se ha vuelto a celebrar la procesión de las 40 horas concedida por el Vaticano, pero de una manera diferente, como todo lo que acontece en tiempos de pandemia.
Sin Palio y sin el calor de los feligreses, este año el Santísimo Sacramento ha procesionado acompañado por el sacerdote Pedro Ildefonso, el monaguillo Raúl Galvañ, y portado por el párroco de San Pedro, Francisco Rayos.
Como novedad, el Santísimo Sacramento era transportado en una nueva Custodia, mucho más grande que la anterior, que ha estado expuesta también en un nuevo expositor presidiendo el altar mayor de la Iglesia de San Pedro durante los tres días en el que se recuerda las 40 horas que Jesús estuvo en el Sepulcro, ambos elementos regalados hace dos años a la parroquia.
Recordamos que también de manera extraordinaria, el Santísimo Sacramento ha estado acompañado por La Santa, que dentro de unas semanas, cumplirá un año habitando la Iglesia de San Pedro.
En 1897 (hace 124 años) el pueblo noveldense vivió una plaga de langostas e hicieron un voto al Santísimo de que, si la plaga no afectaba a los cultivos, pedirían poder celebrar una procesión en acción de gracias a Jesús en la eucaristía. Según relata Rayos, la plaga no llegó a afectar y pidieron esta procesión al Vaticano. El Papa León XIII concedió la bula papal para que se pudiera realizar esta procesión, con la condición de que se realizara todos los años. En caso de no llevarla a cabo, se perdería el derecho a esta procesión.
Es por ello que este año, y para no perder este privilegio con el que cuenta nuestra ciudad, única en España, se ha permitido a Francisco Rayos la letanía tras la misa de 19.30h, a pesar de que actualmente están prohibidas las procesiones, saliendo por la puerta principal de la iglesia, rodeando la Plaça Vella, y entrando de nuevo por la puerta lateral de la calle Mayor.
Al volver ha sido recibido por una ovación de los feligreses, terminando la misa con el Himno a Santa María Magdalena.
El pueblo de Novelda ha cuidado mucho esta tradición, recordaba Rayos: “No se ha dejado de celebrar en ningún momento, hubiera tormenta o climatología adversa”. En estos casos el Santísimo salía a la calle, durante un breve espacio de tiempo y sin procesión, como se ha hecho este año.
Miércoles de ceniza
Por la tarde hubo dos eucaristías, a las 18.00 h. y 19.30 h. para respetar el aforo de la parroquia. Además, desde el Vaticano se indicó que este año no se podría poner la ceniza en la frente, sino que el sacerdote la echaría sobre la cabeza, sin tocar a las personas que se acerquen a recibir la ceniza.
El origen de la ceniza proviene de las palmas del Domingo de Ramos del año anterior, este pasado año, como sabemos, no se realizó esta procesión, sin embargo la Junta mayor de Cofradías y Hermandades de Semana Santa compró las palmas y estuvieron expuestas en el altar mayor, por tanto las cenizas de este miércoles de ceniza pertenecen a las palmas del año pasado, cumpliendo la tradición.
