Ha sido galardonado con una estancia en Umbralejo, Guadalajara, para reencontrarse con la vida rural y educar en sostenibilidad
Novelda, el meu poble es un proyecto dedicado a la transmisión de tradiciones como el uso del esparto, la piedra seca y juegos y canciones del pasado, así como a la mejora del entorno urbano con la recogida de latas de aluminio y con murales urbanos sobre la mujer trabajadora.
El premio del Ministerio de Educación ha consistido en una estancia de una semana en un pueblo rehabilitado de Guadalajara cuidando de los huertos, de los animales domésticos, de las colmenas, trabajando en el mantenimiento, reparación y limpieza, conociendo el ecosistema del bosque mediterráneo, aprendiendo nuevos juegos, deportes, relajación y actividades artesanales como la cerámica, la cocina, la cestería, la cosmética… además de aprendiendo inglés.
Así es como los alumnos evalúan la experiencia: “la ayuda mutua, la equidad, la implicación de todos han hecho que la experiencia fuera muy positiva”. Han hecho autocrítica sobre el móvil (“es como desintoxicarse de una droga”) y han superado barreras (“hemos aprendido a no juzgar por las apariencias… superado miedos a los animales… el campo no es aburrido… hemos comido comidas caseras”). Los profesores, han agradecido y aplaudido el buen hacer de sus alumnos de 3-4 ESO que participan desde septiembre en el proyecto y que han ganado esta estancia en Umbralejo.
