El detenido soltaba a los perros cuidadores de la explotación para que atacaran a los animales de la granja, que acababan muriendo por las heridas.
La Guardia Civil ha detenido en Novelda a un hombre español de 63 años como presunto autor de 3 delitos de robo con fuerza en las cosas y 3 delitos de daños, al haber provocado la muerte de 38 animales no domésticos.
Durante los últimos 12 meses, agentes de la Guardia Civil del Equipo ROCA de la Compañía de Ibi (especializado en los delitos cometidos en el ámbito rural), han estado investigando una serie de robos cometidos de forma reiterativa en una misma explotación ganadera de Agost, que se ha saldado con el robo de 21 animales y la muerte de otros 38.
Todos los robos se sucedían de la misma forma: el presunto autor escalaba el muro de más de dos metros de altura que protegía el perímetro y, seguidamente, fracturaba las cadenas de los perros que cuidaban el ganado. Esto provocaba que atacaran al resto de animales de granja, que terminaban falleciendo a causa de las mordeduras.
Sin embargo, hubo otros animales que parecían haber muerto a manos de un humano, porque tenían marcas de heridas inciso-contusas en la parte del cuello o en la zona lumbar, posiblemente realizadas con un estilete u otro objeto punzante.
En el mejor de los casos, el robo consistía en sustraer aperos de labranza, herramientas agrícolas y pequeños animales de granja; o en causar daños que inutilizaban maquinaria agrícola e instalaciones de primera necesidad, como las de agua potable y de energía solar.
Según los primeros indicios, todo apuntaba a que quien accedía a la finca, conocía perfectamente el interior de la instalación, pero también a los perros, ya que los soltaba pero no le atacaban. Así que las sospechas se centraron en personas que tuvieran o hubieran tenido relación con esta explotación.
Tras varios meses de investigación, una cámara de seguridad, instalada de forma estratégica en la zona más afectada de la finca, captó a un hombre entrando en ella. Al confirmar su identidad, se corroboró la relación de este individuo con la explotación agrícola, dado que trabajó allí hacía años, cuidando de los animales y construyendo las instalaciones.
Los agentes del Equipo ROCA de la Guardia Civil, acudieron el pasado martes a la localidad de Novelda, lugar de residencia de este hombre español de 63 años, para proceder a su detención como presunto autor de tres delitos de robo con fuerza y tres delitos de años, por la muerte de animales no domésticos.
Tras pasar a disposición judicial, se decretó la libertad provisional sin fianza.
Los animales fallecidos ascienden a 38, entre los que se encuentran varias especies de gallinas, patos, conejos, cabras, chotos y gansos. Los sustraídos son 21 animales, entre conejos, gallinas gallos y perdices.