¿QUIERE QUE LAS COSAS CAMBIEN?
¿Quiere usted que las cosas cambien? ¿El país? ¿El paro? ¿Su trabajo? ¿Los bancos? ¿Los impuestos? ¿Sí? ¿No? La verdad que yo no sé si algo va a cambiar, pero sí le puedo asegurar algo: si el 25 de Mayo, en las elecciones europeas, usted se queda en casa no cambiará absolutamente nada. Se lo garantizo.
Y también le aseguro otra cosa, el día que los dos grandes partidos, PP y PSOE, se lleven un susto y se den cuenta de que peligra su posición, ese día tomarán buena nota de lo que la gente quiere. Por la cuenta que les trae, lo harán. Porque algunos han hecho de esto, la política, una forma de vida muy lucrativa. Porque algunos se han creído que los cargos y la política son su cortijo personal, donde hacen y deshacen a su antojo, y que nada de lo que hagan o decidan tiene ni tendrá consecuencias. El día que la intención de voto de los grandes partidos se tambaleé, ese día las cosas cambiarán.
Pero si usted, y muchos otros, se quedan ese 25 de Mayo en su casa y no votan algo, algo diferente, algo diferente a lo que llevamos votando y soportando año tras año, todo seguirá exactamente igual (o puede que peor) que hasta ahora. Después de todo, esos políticos que viven a todo trapo de sus cargos y sus prebendas, viajan en clase business, con dietas, sueldazos de infarto, etc. necesitan votos. Y, sin esos votos, tendrán que marcharse a su casa.
Si usted vota a un partido diferente y lo vota porque ha leído sus propuestas y observa a sus líderes, ellos, por lo que se juegan, tomarán nota. No voy a ser ambicioso. Seguramente intentarán hacer trampas, prometerán y no cumplirán, seguirán viviendo a cuerpo de rey, etc. Pero llevarán muchísimo más cuidado, tendrán menos tolerancia para la corrupción y aplicarán algunas de esas medidas, si no les perjudican demasiado…
Yo les voy a detallar algunos puntos de lo que UPyD lleva en su programa electoral para las elecciones europeas, por si les parece, como a mí, una opción interesante.
1. Reforzar una democracia continental y europea, frente a las soberanías nacionales. Porque el avance del nacionalismo amenaza, por definición y por lo que significa, una auténtica Unión Europea.
2. No aplicar en ningún país de la Unión ninguna política de reducción de salarios ni costes. Invertir en la inversión en I+D+i y en una economía productiva, justo todo lo contrario de lo que se ha hecho en España con el PP.
3. Forzar una Unión Bancaria, con criterios supranacionales, para la mutualización de la deuda provocada por las crisis bancarias, incluyendo la generada por el rescate bancario español.
4. Separación de las actividades propias de la banca comercial de las de banca de inversión. Esto, aunque no pueda explicarlo aquí, es la causa principal y última de la crisis que padecemos todos ahora.
5. Poner en marcha un impuesto sobre las transacciones financieras en la UE (tasa Tobin).
6. Un Banco Central Europeo que haga de prestamista de la deuda pública nacional. Para evitar que bancos privados, como sucede ahora, vivan de la compra de esa deuda pública, y no de los préstamos y créditos a empresas y particulares.
7. Una Unión Fiscal que no se limite al control de los déficits públicos solamente, sino que incorpore impuestos compartidos y evite la evasión y los paraísos fiscales.
8. Una unificación de las normativas que afectan al transporte por carretera, aviación, ferrocarriles o navegación
9. Fomentar una política europea común de inmigración
10. Creación de una Seguridad Social Europea y creación de una Inspección de trabajo europea.
Estos son algunos de los puntos de UPyD. Otros partidos tienen otros. Solo hay dos maneras de hacer que las cosas cambien. Una es a través de guerras y revoluciones. Otra, a través de unas elecciones. No lo parece. Pero un puñado de votos puede cambiar las cosas. Ellos, esos políticos, están ahí por ese puñado de votos, no lo olvide. Y, por lógica, otro puñado de votos podrían sacarlos de ahí.
