Artículo de opinión de Víctor Cremades i Payà, concejal de Hacienda y portavoz de Compromís per Novelda
Peor aún que las verdades a medias (la peor de las mentiras) son las medias verdades a medias. Y de esto es de lo que hace gala el portavoz del grupo (que no del partido) Popular en el escrito que publica en diversos medios de comunicación titulado Plan de Saneamiento y equilibrio económico-financiero, sobre la posible cancelación de la deuda municipal en los próximos meses. Todo su escrito está plagado de inexactitudes intencionadas, cuando no falsedades, que responden a un intento espurio de desprestigiar un plan de saneamiento que permitirá al Ayuntamiento pagar una deuda histórica y a los sufridos proveedores, muchos de ellos pequeños comerciantes y autónomos de la localidad, cobrar sus facturas atrasadas de años anteriores, y de paso cargarle a este equipo de gobierno un mochuelo en forma de deuda que todavía posa en el árbol de Partido Popular.
Comienza su escrito diciendo que el partido Popular no se negó a aprobar el mencionado Plan. Ya tiene cosa empezar un escrito con una falsedad, y eso es lo que hace D. José Rafael Sáez, ya que su voto fue abstención, y, que yo sepa, la abstención no significa votar a favor de un proyecto, en este caso la posibilidad de concertar un préstamo para pagar a proveedores, sino todo lo contrario, oponerse, quizás de una forma menos tajante que con el voto negativo, pero, al fin y al cabo, no respaldar a la medida propuesta, que salió adelante con los únicos votos de los grupos Socialista y de Compromís (BLOC-EU-VERDS).
Las medias verdades continúan y no acaban en su largo y farragoso escrito, cuando se refiere a la enorme deuda que nos legó, como regalo de legislatura, a modo de un presente envenenado, que ha constreñido la capacidad económico-financiera del ayuntamiento durante estos dos años. Deuda que se contrajo, y ahí nos duele, en una época de vacas gordas en las que la mayoría de ayuntamientos presentaban números positivos en sus liquidaciones presupuestarias y aprovechaban los ahorros para incrementar los servicios al ciudadano o para pagar deudas a los proveedores. Justo lo contrario que en Novelda. Hablando en números redondos para favorecer la comprensión de tantas cifras: de los 2.700.000 euros que el Sr. Saéz, sumido en una especie de éxtasis amnésico, asume como deuda propia, a la realidad, contrastada con facturas y fechas, existe un verdadero abismo. Ni más ni menos que en 8.200.000 euros se puede cifrar la deuda que nos legó el Partido Popular, ello sin contar las facturas sin consignación que este equipo de gobierno ya ha presupuestado y pagado.
Porque además de los 4.200.000 euros del remanente de tesorería negativo producto de su gestión, que él omite malintencionadamente, habría que haberle sumado los más de 4.000.000 euros que corresponden a la suma de la facturas sin consignación (a esas que dejaron en el cajón) de los años 2004, 2005, 2006 y primera mitad del 2007, gestionados por el PP , a los 800.000 aún pendientes del pago de la zona verde de Mª Cristina, que deberían haber pagado y no lo hicieron, y de un pico de 300.000 euros que todavía queda de la obra de remodelación de la Glorieta de tan resbaladizo recuerdo. A todo ello habría que añadir los intereses de demora que se han generado, y que tienen su origen en el impago de la deuda que el Gobierno Popular contrajo.
Es cierto que este equipo de gobierno durante los dos años de gestión ha incrementado el nivel de deuda, pero no es menos cierto que la crisis económica nos ha cogido de lleno y que los ingresos municipales han sufrido un descenso alarmante. Nos ha sucedido igual que al resto de municipios del Estado Español: menores ingresos con unos niveles de gasto ineludibles, que no se han podido cubrir a pesar de la reducción a la mínima expresión de los gastos considerados como superfluos en comparación a los de la época del PP. Con ello se ha puesto de manifiesto una vez más que es necesaria una reforma en profundidad del sistema de reparto de los fondos del Estado, de forma que los ayuntamientos dejemos de ser la hermana pobre de la administración del Estado y recibamos recursos en consonancia a los servicios que prestamos a los ciudadanos.
Y acabo no sin hacer mención al Plan de saneamiento y equilibrio económico y financiero elaborado por la intervención municipal, necesario para poder optar al crédito que el Estado nos permite excepcionalmente para liquidar esta deuda cifrada en 14,7 millones de euros (la mayoría, como se ha podido colegir, generada por el Partido Popular) que permitirá a muchos pequeños empresarios y autónomos continuar con sus negocios, y que nada tiene que ver con el plan económico-financiero aprobado en 2004 para hacer frente al primer remanente de tesorería negativo o déficit -como ustedes quieran- de la historia más reciente de nuestro ayuntamiento (por cierto, para nada menos profundo que el ahora redactado), que hemos arrastrado hasta hoy, con la diferencia que la parte correspondiente al Partido Popular se generó en una época en que a los perros se les ataba con longanizas.
un article molt interessant. gràcies víctor per obrir els ulls al poble i dir les coses claretes. per favor, doneu-li la màxima difussió a l’article.
a-r. abat
menut murri, ha passat de ser el defensor de l’estalvi al derrochador numere un.avui jo cree que ningun novelder li comprava una vespa de segona a aquest home. des que gaudeix de la jubilació d’or gràcies als nostres impostos se li ha posat un somriure d’orella a orella
jolines Victor, has aprendido castellano. Ya era hora.