Artículo de opinión de Mariló Flores, C’s
Esta ha sido la Navidad más atípica de la historia. Tras la eclosión del coronavirus parece que estamos viviendo una realidad paralela en una sociedad distópica donde en cada capítulo la trama da un giro inesperado y el final, a cada segundo, parece más incierto. Todo lo que está sucediendo desde marzo de 2020 ha superado ampliamente lo imaginable.
Pese a ello, ha sido y es admirable que, ante estas grandes dificultades, donde la exigencia ha sido ingente, los ciudadanos de Novelda han realizado un esfuerzo encomiable para paliar sus efectos, propagación y desarrollo.
Habéis soportado confinados semana tras semana que se convirtieron en meses. Y durante ese tiempo convertisteis vuestros hogares en colegio, parque y cine para que vuestros hijos superasen un confinamiento necesario, pero difícil y exigente. Habéis tomado medidas de precaución sociosanitarias inauditas hasta hace meses ¿quién nos hubiera dicho que limpiaríamos cada envase de cada compra con lejía, usaríamos mascarillas, no nos abrazaríamos y un sutil toque de codo sería nuestro saludo?
En definitiva, habéis sacrificado todo por un bien común que pueda asegurar salud y futuro.
Porque definitivamente volveremos a disfrutar de abrazos y sonrisas, y nuestro pueblo podrá asistir a sus procesiones en Semana Santa o participar en sus cofradías. Volveremos a celebrar nuestras fiestas de Moros y Cristianos: sus desfiles, pasacalles, ofrendas y verbenas, y cómo no, volveremos a acompañar a nuestra patrona Santa Mª Magdalena en romería a nuestro pueblo y de vuelta a su Santuario.
Estamos seguros de que superaremos esta crisis y que saldremos reforzados de ella. En palabras del escritor y filósofo Elbert Hubbard: “Un poco más de esfuerzo, y lo que parecía irremediablemente un fracaso puede convertirse en un éxito glorioso”.
Para ello, es imprescindible tener mandatarios que se responsabilicen y trabajen con el mejor equipo científico disponible, que ordenen medidas consensuadas, con una estrategia definida que no varíe cada poco. Además, deben realizar el número de pruebas necesarias a toda la población, y ahora que por fin, disponemos de una vacuna que nos posibilita salir de esta crisis sanitaria, deben ser capaces de coordinarse de manera efectiva y saber planificar para agilizar la imposición de la misma.
Hasta hoy en día, de manera general, aunque ha habido excepciones, se han cumplido con las normas de manera notable. Colegios, comercios, empresas y negocios locales han adaptado fielmente todo tipo de innumerables protocolos.
Orgullosos de Novelda y los noveldenses.