Este pasado mes de diciembre llegó, puntual como siempre, el ejemplar de Novelda Digital en el que aparecía, por fin, el modelo de ciudad que tiene nuestro alcalde, supongo que en su mente. Un modelo de ciudad para las personas (para quién si no), para desarrollar tu proyecto vital. Hasta aquí, totalmente de acuerdo.
Cualquier modelo de ciudad debe encontrar el equilibrio, nunca fácil, entre la tranquilidad del ciudadano, la actividad comercial y el desarrollo de su tejido productivo.
Queremos que nuestra ciudad sea transitable, verde, sostenible, pero para ello también necesitamos ser una ciudad atractiva para nuestros vecinos y visitantes foráneos, para fomentar el desarrollo de la actividad comercial y facilitar la actividad industrial.
Y, desde mi punto de vista, no facilita nada el desarrollo comercial de la ciudad el cambio de (sin)sentido de algunas calles de Novelda.
Han conseguido hacer una ciudad muy difícil de transitar en vehículo (ese gran enemigo para la progresía patria), sobre todo para nuestros visitantes foráneos. Mantengo contacto con muchas personas de nuestras localidades vecinas que me manifiestan su desconcierto sobre tales cambios.
Por ejemplo, con el cierre de la oficina del Banco de Sabadell de Monforte del Cid y su traslado a Novelda, cada vez que tienen que venir a hacer una gestión bancaria “juran en arameo” por varios motivos, por la falta de aparcamiento en esta zona y por el descontrol en la circulación.
Esta incomodidad afecta directamente al tejido comercial de Novelda. Nuestro alcalde quiere que no seamos una ciudad dormitorio…, pero el camino que llevamos es ese, convertirnos en una ciudad con la actividad comercial bajo mínimos en la que es más fácil ir a comprar a un centro comercial que acercarse al centro de Novelda.
Los comercios del centro y de la zona de la Glorieta tienden a desaparecer. No es el modelo de ciudad, en este aspecto, que quiero.
Y no vamos a dejar de lado el otro gran problema para fomentar el emprendimiento comercial. En Novelda estamos montando un centro dedicado al emprendimiento, pero vamos a “crujir” al autónomo desde el Gobierno Central.
Vamos a subirles las cuotas e impuestos a los autónomos hasta hacer de la recaudación global algo confiscatorio, llegando a pagar, por todos los conceptos, más del 50% de lo ganado.
Así, entre los nuestros y sus mayores, se nos quitan las ganas de querer emprender en este pueblo. Nuestro futuro será, por la falta de riesgo, querer ser funcionarios. Así estamos reduciendo el paro a nivel nacional. No es lo que quiero para mi pueblo.