Las cuentas se elevarán en 2023 a 283,7 millones, un 4,3% más que este año, y reforzarán la inversión en los municipios
El pleno de la Diputación de Alicante ha aprobado esta mañana el presupuesto de 2023 que asciende a 283,7 millones de euros, un 4,3% más que el ejercicio anterior y el más alto en la historia de la institución provincial. Las cuentas, que en el consolidado suben a 325,7 millones de euros, han sido respaldadas por los diputados del equipo de gobierno– Partido Popular y Ciudadanos- mientras que los grupos PSOE y Compromís han votado en contra.
El presidente de la institución provincial, Carlos Mazón, ha puesto en valor el diálogo abierto en las últimas semanas con la oposición para alcanzar un acuerdo que, finalmente, no ha sido posible, a pesar de que desde el equipo de gobierno se han aceptado para su incorporación, bien a través del presupuesto ordinario o vía remanente, 6 de las 7 propuestas presentadas por Compromís, por valor de unos 60 millones de euros, y 11 de las 14 enmiendas de los socialistas por otros 62,8 millones de euros.
“El debate de los presupuestos se ha realizado con extraordinario diálogo, buscando el acuerdo hasta el mismo día de ayer, ya que se trata de un sistema de trabajo por el que hemos apostado a lo largo de la legislatura y que, sin embargo, no se produce en otras administraciones como la Generalitat o el Gobierno central”, ha indicado Mazón, quien ha puesto en valor algunos de los ejes centrales de estas cuentas como la supresión del recargo provincial del IAE, el refuerzo de la inversión para los municipios, el apoyo a los sectores productivos o la atención a los colectivos más vulnerables.
Así, el presidente ha avanzado que las partidas extraordinarias que se pondrán en marcha gracias a la saneada situación de las arcas provinciales, que tiene deuda cero, “nos permitirán el próximo año seguir impulsando el bono consumo, ayudando a los autónomos y familias a afrontar la crisis energética y atendiendo a las personas que más lo necesitan”, al tiempo que ha lamentado que desde la Generalitat no se esté haciendo nada en este sentido.
Por su parte el diputado de Economía y portavoz del Grupo Popular, Eduardo Dolón, ha defendido las distintas partidas del presupuesto que -ha incidido- “son las más altos de la historia de la Diputación” y ha agradecido las aportaciones de los grupos de la oposición “para mejorar aún más estas cuentas” y que son fruto “de una clara apuesta de este equipo de gobierno por el diálogo constructivo”.
“Hemos trabajado para sacar adelante unos presupuestos equilibrados, solidarios, reales y que buscan el progreso, el desarrollo, la ilusión y la esperanza para salir adelante en estos momentos”, ha indicado Dolón, quien ha destacado, entre otras partidas, la inversión de más de 133 millones de euros que llegarán a los ayuntamientos para garantizar la prestación de servicios básicos en los municipios. “La Diputación ha venido demostrando en estos últimos años que es la mejor alidada de los ayuntamientos para hacer frente a la crisis económica y social. Hemos estado ahí y lo vamos a volver a estar para ayudarles a afrontar el incremento del gasto social, la variación de precios y la crisis energética, para reactivar las inversiones en materia de cultura, deportes, agua, medio ambiente o carreteras, como también lo vamos a volver a estar para apoyar a los autónomos y a las pymes”, ha manifestado.