El departamento de Calidad Ambiental ha encargado un estudio de todo el arbolado de la ciudad, que asciende a 4.100 ejemplares, de los que 110 han sido calificados como irrecuperables, por lo que serán talados para evitar peligros.
El departamento de Calidad Ambiental ha presentado los resultados del estudio del arbolado urbano que, tras analizar los aproximadamente 4.100 ejemplares distribuidos en parques, jardines y calles de la población, ha diagnosticado 110 árboles como irrecuperables y otros 76 muy problemáticos
El estudio pormenorizado del arbolado del municipio ha sido realizado por una empresa especializada a petición de Calidad Ambiental tras la caída de varios ejemplares durante los episodios climatológicos adversos de 2017. Del mismo se desprende que, aunque el estado del arbolado es bueno, existen zonas conflictivas como es el caso del Parque del Oeste, del paseo de Los Molinos, y de algunas calles y jardines donde las especies existentes no son las más apropiadas o las podas realizadas no han sido las adecuadas.
El concejal de Calidad Ambiental, Francisco J. Cantos, ha señalado que la «seguridad es prioritaria», de forma que, de acuerdo con las conclusiones del trabajo realizado, será necesario proceder a la tala de los árboles calificados de irrecuperables mientras que en los 76 ejemplares diagnosticados como problemáticos se «realizará un seguimiento en detalle».
Uno de los principales problemas que se apunta en el estudio es la presencia de pinos, una especie no adecuada, según indicaba el técnico del departamento, Francisco Soro, para calles y pequeñas zonas verdes urbanas, por su compleja gestión y poda. Asimismo se incide en la incorrecta poda histórica de algunos ejemplares, como los Ficus de La Glorieta, y la inapropiada selección de las especies de árboles plantadas en diversas calles con aceras estrechas, estrangulados por los alcorques y que ha acabado invadiendo muchas fachadas con las consiguientes molestias a los vecinos.
El documento de trabajo con el que cuenta Calidad Ambiental recomienda diferentes medidas para mejorar la situación de la masa arbórea del municipio como mejorar la formación del personal que interviene en el proceso de podas, la plantación de nuevas especies y la realización de un estrategia que contemple el desarrollo de arbolado de calidad con el fin de evitar problemas de manejo, reducir los costes de mantenimiento y mejorar el balance medioambiental.
