El Ayuntamiento de Novelda, a través de la concejalía de Medio Ambiente ha iniciado la campaña de tratamiento contra la plaga del picudo rojo (Rhynchophorus ferrugineus) en las palmeras de los jardines públicos.
El tratamiento con productos fitosanitarios lo está llevando a cabo el personal propio adscrito al servicio de Jardinería de la concejalía de Medio Ambiente, y con el apoyo del camión-cesta del departamento de infraestructuras para llegar a las copas de estas palmeras que en muchos casos son de gran porte.
El edil de Medio Ambiente, José Miguel López, ha señalado que “pretendemos frenar que la plaga llegue a las palmeras más emblemáticas de los parques y jardines públicos”. Desde el año 2005 se viene detectando en el término municipal de Novelda la presencia de este insecto con la infestación de varias palmeras en zonas del extrarradio, afectando desde entonces a los parajes del Campet, El Pla, Ledua, Horna Baja, Casas de Sala y Horna Alta.
López ha subrayado que “desde el Ayuntamiento desarrollamos un plan de vigilancia en los jardines municipales, con el fin de prevenir la infección de las palmeras existentes en suelo público y, a su vez, se atienden decenas de llamadas de vecinos de Novelda, solicitando información sobre esta plaga o pidiendo la inspección de las palmeras de su propiedad por mostrar indicios de infección, actuaciones que en todo momento, han sido apoyadas por servicios y personal técnico dedicados por la conselleria para esta problemática”.
Desde la concejalía de Medio Ambiente se ha hecho un llamamiento a los propietarios de palmeras para que, ante la más mínima sospecha de afectación, se pongan en contacto con ellos en el teléfono 965 60 26 90 Ext.646, o directamente con la conselleria de Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua en el teléfono 900 532 000, con el fin de dar las instrucciones necesarias para actuar.
En cualquier caso, desde el área que dirige López también se informa que la Ley de Sanidad Vegetal obliga a todo propietario de palmeras a realizar un seguimiento de las mismas, actuando si se encuentra infestada con el tratamiento o tala del ejemplar (para su destrucción controlada) con el fin de evitar la propagación de la plaga. En caso contrario, el propietario de la palmera podría ser sancionado por no actuar frente a la plaga.