Armando Esteve quiso felicitar al economista noveldense, que trabaja para la Reserva Federal de Dallas, por el premio que le ha concedido recientemente el Consejo Social de la Universidad de Alicante a su trayectoria profesional.
El despacho de alcaldía ha sido el escenario que acogió ayer la recepción oficial del alcalde, Armando Esteve, a Enrique Martínez García, el noveldense que ejerce, desde hace años, su trabajo en Estados Unidos como asesor de la Reserva Federal de Dallas y cuya trayectoria ha sido reconocida recientemente por el Consejo Social de la Universidad de Alicante.
Con esta recepción el alcalde ha querido felicitar y mostrar el reconocimiento de la ciudad de Novelda a Martínez. Esteve aprovechaba para animar a los estudiantes noveldenses a «esforzarse y seguir los pasos de Enrique para llegar tan lejos como él», mientras que Martínez, que ha agradecido el gesto del Ayuntamiento de Novelda, animaba a los jóvenes a «abrirse al mundo y perseguir su propia carrera porque eso beneficia a todos».
En este encuentro Enrique Martínez ha explicado su trabajo en la Reserva Federal de Dallas, donde desarrolla una faceta de investigación para «ayudar a comprender cómo funciona la economía y cómo corregir los posible problemas que puedan surgir» y una vertiente de asesor al presidente de la Reserva Federal a la hora de adoptar decisiones de política monetaria.
Para Martínez, el premio que recogió la pasada semana en el ADDA y que le otorgó el Consejo Social de la UA, supone «un gran orgullo», ya que «es el reconocimiento a mi carrera por parte de quienes me ayudaron a conseguir lo que soy a día de hoy». Y es que, según contaba, fueron algunos de sus profesores en Alicante los mismos que le animaron a continuar sus estudios en Estados Unidos, alcanzando más tarde un puesto tan importante como el que ahora ocupa.
De momento, asegura, continuará trabajando para la Reserva Federal de Dallas, aunque su intención es volver algún día a España y «aplicar todo lo que he aprendido», aunque no ha recibido ninguna oferta que le permita dejar su trabajo en América.
Sus padres pueden estar muy orgullosos de estos dos hijos, grandes y valiosos en los estudios pero encima humildes y buenas personas.