La Concejalía de Medio Ambiente de Novelda ha comenzado las labores de desbroce en el cauce del río Vinalopó a su paso por el casco urbano, con el objetivo de mejorar el entorno natural y facilitar el uso ciudadano de la zona.
Los trabajos, realizados por una empresa local y financiados con presupuesto municipal, cuentan con la autorización de la Confederación Hidrográfica del Júcar.
La intervención se centra en desbrozar cuatro metros a ambos lados del río desde el muro antirriadas, abarcando más de 1.300 metros de recorrido urbano, lo que supone una limpieza aproximada de 10.400 metros cuadrados del cauce. Esta actuación permitirá facilitar las tareas de limpieza de residuos, prevenir incendios forestales y favorecer que los vecinos puedan pasear o practicar deporte en este espacio natural.
Desde el Ayuntamiento se ha subrayado que el desbroce se realizará de manera controlada para respetar la vegetación de ribera, que es fundamental para la biodiversidad local, ya que actúa como soporte de la fauna asociada al río y contribuye a regular la velocidad del agua en caso de crecidas.
Esta acción forma parte del Plan de Acción para el Cambio Climático del municipio (PACES), cuyo objetivo es la renaturalización del río Vinalopó, un espacio que cuenta con más de 40.000 metros cuadrados de vegetación natural colindante con el casco urbano, que funciona como sumidero de carbono y refugio para la biodiversidad.
Además, se ha anunciado que próximamente se llevarán a cabo otros trabajos, como la actuación en el carrizo, planta rastrera, de la Rotonda del Ledua y la mejora del firme en el camino próximo al Chorro de la Sud, con el fin de habilitar una zona de paso más segura y cómoda para peatones y ciclistas.
Para la primera quincena de septiembre, el cauce, al menos el que pasa junto a las vías transitables y viviendas, debe estar limpio y rasurado a como mucho 30 centímetros de altura que es lo que se necesita para frenar la velocidad laminar del agua y evitar el arrastre de sedimentos. Todo lo demás es absolutamente innecesario, además de ser un obstáculo para los elementos en flotación que pueda traer cualquier riada.
El río Vinalopó nace en la sierra de Mariola y su longitud viene a ser de unos 96 km. Que se adecente a ciertas medidas el tramo de menos de 2 km. que discurre frente a las viviendas y vías públicas, (desde los antiguos «Baños» hasta la extinta «Marmoles Bempe» en mi humilde opinión, no creo que vaya a ser determinante para la fauna asociada al río y la biodiversidad. Es más, estoy seguro de que permitir que la vegetación tenga como ahora arbustos de más de tres metros de altura puede resultar un potencial peligro ante una riada.
Pero claro, si el Sr. Concejal piensa que esto va a afectar directamente al cambio climático del municipio porque es un sumidero de carbono, ya me me deja más tranquilo, habida cuenta de que sin duda alguna, estamos gobernados por los mejores gestores y los más capacitados.
Por cierto Sr. Concejal, ¿no ha pensado en poner contenedores de color rosa fucsia para deshacernos de lo que usamos en esos días especiales que tenemos las mujeres? Es porque como queda todavía sitio si quitamos algunos coches….