EL AMOR Y LA NAVIDAD
En estos tiempos de tantas incertidumbres en las que estamos viviendo la mayoría de las personas, la Navidad se presenta de una manera muy especial, por cuanto muchas familias están pasando por tal cantidad de necesidades, que nuestra solidaridad y amor hacia ellos se debe exteriorizar con más ahínco si cabe.
Pensemos que estas Navidades hay personas que están en la calle sin techo donde cobijarse por haberlos desahuciado de sus casas bancos que lo tienen todo y que no han dudado en causarles sufrimiento, habiendo otras formas más humanas de solucionar los conflictos.
Pensemos también en aquellos que necesitan la atención médica y que por distintas causas se han quedado fuera de la cobertura sanitaria, o aquellos otros que tienen una pensión mínima y que en estos momentos necesitan pagar parte de sus medicinas, y una parte también de los desplazamientos en ambulancia a sus diálisis o curaciones anticancerígenas.
Tengamos también en cuenta a todos aquellos que no encuentran trabajo y además tienen a su cargo enfermos y la ley de la dependencia no les cubre sus necesidades, o esos otros que ya no tienen ningún ingreso en sus casas por no cobrar ya el paro ni otras prestaciones sociales, y no tienen donde acudir, y además están pendientes de ser desahuciados de sus casas, además.
Y a los políticos y a los responsables de los bancos, hay que decirles siempre, y más en estas Navidades, que sean sensibles hacia los que más sufren de la sociedad y pongan los medios necesarios, pero con sentido del amor, la justicia y la fraternidad, y sin intenciones monetaristas, para que el sufrimiento sea erradicado de nuestras vidas, porque si hay algo cierto en este mundo es que ellos tienen la posibilidad de que cambien nuestras vidas o se hundan, por todo ello hay que pedirles que recapaciten sus decisiones, y vean en la celebración de la Navidad con ese niño nacido y símbolo de la pureza, la bondad y el amor, que el cambio que necesita nuestra sociedad es posible, adoptando aquellas acciones y leyes, siempre basadas en la solidaridad y la fraternidad que necesitamos para poder llevar una vida digna; por todo ello digo:
Es el amor un sentir
que nace en el alma,
por eso se siente latir
y del corazón emana.
Lo debemos dar a manos llenas
sin esperar recompensas,
porque cuando el amor es fraterno
es indulgente y sagrado,
porque se da a los enfermos
y a los más necesitados,
tal como se recibe de Dios
y del alma que lo está manifestando.
El amor no es egoísta,
ni es maquinal,
ni justiciero por ley,
ni quebranta a las personas,
ni hace de juez justiciero,
ni pone cadenas al reo,
ni da desconsuelo al enfermo,
ni dispone de dinero,
por eso el Padre Celestial
lo da a manos llenas,
y sin esperar nada
solo por su amor fraterno.
El amor es ser bondadoso,
es ser amable, afectuoso,
caritativo, dádivo,
constructivo, ordenado,
misericordioso, piadoso,
selectivo, apreciativo,
honrado, no disparatado
ni encumbrado,
sino humilde y benigno
como es el Padre Creador
luminoso y esencialmente
súper comunicativo,
poderoso y a la vez ilustrativo
porque es su sustancia gloriosa
incrustada en el alma
para que el amor crezca
como crecen las plantas
y las flores que brotan
en la estación primaveral
y nos dan su amor
con ese aroma consustancial
sin distinciones humanas
porque son súper dádivas
y a las personas se nos entregan
para engalanar nuestras casas,
y en esa entrega
nos manifiestan el amor
que sin nosotros darnos cuenta
ellas mismas nos declaran
que el verdadero amor
es un sentimiento de entrega,
las mismas flores nos hablan
y nos lo manifiestan,
aprendamos de ellas
y reconoceremos el amor
como sustancia viva
de Nuestro Padre Creador
El amor humano es diferente,
se empequeñece,
porque se engarza
de egoísmo mundano
y se vuelve domesticado,
y ahí se instaura el quebranto
del amor en nosotros,
pues se vuelve convencional
porque a manos llenas no lo damos,
y es muy de lamentar,
porque también debe ser fraternal
y también racional,
pues por todo ello
no lo deberíamos mancillar.
Ofrezcamos esta Navidad a los más necesitados para que nuestra ayuda pueda convertir en ciertas las palabras de ese niño nacido y que se hizo hombre, Jesús de Nazaret, que decía (BIENAVENTURADOS LOS QUE PASAN HAMBRE Y SED DE JUSTICIA POR QUE ELLOS SERÁN SACIADOS), y nosotros a través de su amor, somos los que podemos convertir sus palabras en una realidad.
Feliz Navidad, y que la Paz y el Amor reinen en nuestros corazones
Sr. Aranda, me he alegrado muchísimp de saber de Vd., y mis mejores deseos de fraternidad y afecto, y también gracias de saber que le gustan mis reflexiones sobre nuestros sentimientos y nuestro amor hacia los demás. Un abrazo.
Sr. José Penalva Navarro: Gracias por su artículo que es de los que echamos de menos y enhorabuena por su numen. Feliz Navidad.
Tenéis razón, Vicente y A.M., los bancos y compañías de seguros lo controlan todo, porque además son las que invierten sus dineros en las grandes empresas petroleras , eléctricas y grandes constructoras, y nos exprimen por todas partes, y como eso que dicen que les gusta la libertad y el comercio libre de interferencias, todo es mentira porque cuatro grandes entidades bancarias lo controlan todo y los gobiernos están al socaire de estos, por tanto no tengamos dinero en los bancos, no hagamos ningún seguro que no sea obligatorio por ley, como el seguro de incendios sobre una casa hipotecada o el del coche, los demás que se loS hagan ellos, gastemos la menor luz posible, no hagamos ningún préstamo, ni personal ni hipotecarios, alquilemos cuando necesitemos una vivienda, y de esta forma empezarán a ganar menos y se sentirán afectados ellos también, y cuando votemos exijamos partidos que quieran en serio controlar a estas entidades que están fuera de cualquier control, diga lo que diga en Banco de España o el Banco Central Europeo, porque al final todos ellos juntos formal una GRAN FAMILIA.
Bonitas palabras. Pero creo que los banqueros y los políticos no quieren saber nada de los que lo han perdido todo, o casi todo.
Los banqueros sólo quieren ganar más y más, hasta el infinito y cuando hayan estrangulado a la sociedad, pues recogen los bártulos y se van con su música a otra parte (por ejemplo, a los países emergentes y que nos hacen la competencia desleal).
Y los políticos de altos vuelos, casi lo mismo. Piden, o imponen, más y más sacrificios para ver «en el futuro» los buenos resultados que, según ellos nos esperan. pero cuando vean que la sociedad ya no les aguanta más, saldrán corriendo como el Capitán Araña.
Así es que… vale, bonitas palabras, repito, pero… Felices Fiestas a todos, ya que no tengo otra cosa que ofrecer.
A los políticos y a los banqueros no hay que decirles nada que ellos no sepan. Si no se han sensibilizado hasta ahora, no tiene porqué ser distinto en estos días en el que se celebra el Nacimiento de Jesús. A la gentu…..que manejan este país , » se las trae al pairo».
El año que entra, vamos a saber lo que es bueno. Y por mucho que se diga en los medios de comunicación va a ser`poco. Nos van a esquilmar hasta el tuétano.
Malhechores!!» Tiempo al tiempo.» Me dará, desgraciadamente, la razón