‘NOVELDERÍAS. DE LO LOCAL Y LO GENERAL’. Opinión de Luis Soler, PP Novelda

Tribuna de Opinión de Luis Soler

Hace unas semanas, mis compañeros de la Agrupación Local del Partido Popular de Novelda tuvieron a bien nombrarme presidente de la Junta Gestora, que pilotará la transición hasta las próximas elecciones internas.

En breve daremos a conocer los nombres de quienes la componen. Acepto este cargo con la responsabilidad de liderar un equipo multidisciplinar que tiene un objetivo claro, recuperar la confianza que los noveldenses nos otorgaron en el pasado y recuperar el Gobierno Municipal. Quiero agradecer el trabajo, poco reconocido y vistoso, que la anterior Junta desarrolló durante los 4 años anteriores a estos últimos comicios municipales y en especial, mencionar la labor que nuestras concejalas, Hortensia y Bienvenida, desarrollaron en el Ayuntamiento, de oposición y fiscalización municipal. Muchísimas gracias. Al lío.

Configuramos nuestra agrupación local de manera bicéfala, en la que David Beltrá liderará la acción de fiscalización municipal y candidatura y yo la acción propia de partido, de manera perfectamente integrada y coordinada. Esto nos permite multiplicar nuestros esfuerzos en la defensa de los intereses de los noveldenses. Así podremos hacer frente a la soberbia que trasmite el actual equipo de gobierno y que se aprecia en cada una de sus intervenciones en los plenos municipales, a la vez que defendemos el interés general. Aprovecho para trasmitirles que, como partido de ámbito nacional, presentaremos todas y cada una de las mociones que consideremos oportunas, en la defensa del bien común, de un estado configurado para personas iguales y con los mismos derechos.

No aceptaremos que se vulneren derechos, que los son de todos, que se humille al Estado con amnistías para los que sólo buscan la separación. Mi vida profesional se desarrolla entre continuas negociaciones, negociaciones con clientes, proveedores, trabajadores, sindicatos, etc. La negociación busca encontrar puntos de acuerdo comunes, cediendo las partes en sus pretensiones iniciales, salvo que la negociación empiece en máximos innegociables (en este punto estamos…).

En política la negociación pretende que el bien sea común, para todos. La negociación que estamos viendo cada día entre socialistas y separatistas no busca ese bien común, para el conjunto. Es una negociación cuyo único objetivo, para una parte, es cubrir su “ansia de mandar” y para la otra el objetivo es la ruptura del estado. Me temo que todos perderemos. Al tiempo. Y no quiero cerrar este artículo sin mostrar mi pesar por el cruel atentado en Israel.

Pedimos que se libere a todos los rehenes usados como escudo, así como también pedimos que la respuesta sea proporcionada, protegiendo a toda la población civil palestina, que nada tiene que ver con los terroristas de Hamas.