Tribuna de Opinión de Daniel Andrés
Son muchas las ocasiones que, hablando con los interesados que vienen a conocer el Museo o nos acompañan en alguna de las visitas guiadas que realizamos en Novelda, se sorprende del variado y rico patrimonio que atesora nuestra localidad en cuanto a los recursos turísticos, históricos y culturales que tenemos, surgiendo siempre (o casi siempre), un comentario que nos hace reflexionar, en relación a las innumerables veces que, con motivo de cubrir nuestro tiempo libre (si las condiciones familiares y personales lo permiten), salimos de las fronteras municipales para viajar y desplazarnos, a menor o mayor distancia, hasta puntos muy diversos de la geografía, con tal de conocer enclaves o “cosas” que en algún momento dado y por las causas que sean, nos han llamado la atención, dejando “para otro momento” (la mayoría de veces por desconocimiento), las posibilidades de similares características que existen en casa.
La verdad es que Novelda lleva ya bastantes años intentando poner en valor estos recursos, poniendo como ejemplo de ello la recuperación del Castillo de La Mola, con la reciente rehabilitación de su muralla norte; además de la inauguración de la Ermita de San Felipe Neri durante el pasado mes de enero de 2023, uno de los espacios que, como suelo decir personalmente “…es el más importante desde el punto de vista cultural, patrimonial, histórico y arqueológico, de los que atesora nuestra localidad…”, tras su adquisición al Obispado de Orihuela por parte del Ayuntamiento en el año 2008 y las excavaciones arqueológicas realizadas en su interior entre el 2009 y el 2011, con vistas a su recuperación y puesta en valor como espacio cultural polivalente.
En este sentido, el último pequeño grano de arena en todo este “puzle”, se ha hecho realidad con la apertura de una nueva sala expositiva, de carácter temático sobre la citada ermita de San Felipe, dentro del Museo Histórico-Artístico de Novelda (sito en la 2ª planta de la Casa de Cultura), ampliando así un circuito cultural para que el visitante que lo desee, pueda conocer mejor los distintos monumentos y museos que nos rodean.
Por indiferente que nos pueda parecer el tema, lo cierto es que Novelda atesora un gran tesoro patrimonial como pocas localidades de nuestro entorno, con infinidad de posibilidades que podrían ir directamente en beneficio de nuestra ciudadanía en vertientes como la comercial y turística, ahora bien… ¿hasta qué punto hemos sabido y tenido la oportunidad de aprovechar estos recursos?