Han sido detenidos los once miembros de la organización criminal y el juzgado ha decretado el ingreso en prisión de tres de ellos
La Guardia Civil ha desarticulado un grupo criminal muy activo y peligroso dedicado al robo en domicilios, establecimientos y naves industriales en las comarcas del Campo de Cartagena (Murcia) y de la Vega Baja (Alicante). Algunos de los detenidos, que residían en viviendas ocupadas en el barrio de Lo Ferro (Murcia), habían generado problemas de inseguridad y malestar entre los vecinos, creando alarma social.
Por ello, se acusa al grupo de 54 delitos de robos con fuerza, tres delitos de robos de vehículos, seis delitos de usurpación de estado civil, un delito de tráfico de drogas y el delito de pertenencia a grupo criminal. No solo robaban joyas, relojes, teléfonos móviles o material informático de las casas, también adquirían vehículos a motor, gasoil o incluso cobre.
Cronología
Durante los meses de marzo y abril de este año, la Guardia Civil detectó un aumento del número de robos en viviendas en los municipios de Pilar de la Horadada (Alicante) y Torre Pacheco (Murcia), en los cuales el modus operandi era el mismo.
Inmediatamente, el Área de Investigación del Puesto Principal de Pilar de la Horadada inició las correspondientes investigaciones, dándose cuenta de que los mismos delincuentes estaban actuando también en la comarca del Campo de Cartagena.
Estas investigaciones se cruzaron con las del Área de Investigación del Puesto Principal de Torre Pacheco y las de los Equipos ROCA de Torrevieja y Torre Pacheco, por lo que todas las unidades decidieron unir esfuerzos y poner en marcha la Operación Salado
A través de un análisis exhaustivo del modus operandi utilizado, y tras el estudio de diversos indicios y pruebas, pudieron relacionar a uno de los miembros de la banda en el lugar de uno de los robos cometidos, llevando esto a identificar al resto del grupo. Los detenidos eran diez varones de nacionalidad marroquí de entre 18 y 25 años y una mujer española de 19 años, todos con multitud de antecedentes penales.
La banda era organizada y se distribuía las tareas de forma disciplinada. Los líderes del grupo dirigían al resto de los miembros, se encargaban de la logística de los delitos y vendían su botín en el “mercado negro”.
Tras los registros y las complejas investigaciones requeridas, la Guardia Civil ha detenido a los once integrantes de esta organización criminal, tres de los cuales han ingresado en prisión. Además, los agentes han recuperado diversas piezas de joyerías, relojes, teléfonos móviles, material informático y diversas garrafas que contenían gasoil. También han intervenido 2,5 kilogramos de marihuana, un vehículo a motor y herramientas utilizadas para cometer los robos.
En el operativo han participado Unidades de Seguridad Ciudadana (USECIC) de las Comandancias de la Guardia Civil de Murcia y Alicante, el Servicio Cinológico de Alicante y Murcia y las unidades de Seguridad de Ciudadana de los puestos de la Guardia Civil de las localidades afectadas, además se contó con personal del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) nº 2 de Sevilla. En total, en el operativo participaron más de 100 efectivos de la Guardia Civil.
Pese al desmantelamiento de la organización y la recuperación de los objetos robados, la Guardia Civil continúa con las investigaciones, puesto que no se descarta que el número de afectados aumente.