Los jubilados no tendrán que renovar la bonificación sino que una vez concedida ya se les aplicará los años siguientes
El pleno del Ayuntamiento de Petrer ha aprobado la actualización de la tasa de recogida, transporte y tratamiento de residuos en base a una normativa europea que obliga a todos los ayuntamientos del país a que la tasa cubra el cien por cien del coste del servicio, algo que no ocurría con los 49,92 € anuales que se han venido pagando hasta ahora. Como se anunció hace días, la tasa pasa de 49 a 118,61 € anuales, lo que supone poco más de dos euros a la semana por este servicio.
El concejal portavoz del equipo de Gobierno, Fernando Portillo, ha subrayado que mantener y actualizar estas tasas es una «obligación legal» para todos los ayuntamientos y ha destacado la «responsabilidad» con la que el equipo de Gobierno ha abordado este asunto en Petrer. Ha lamentado la falta de apoyo de la oposición a la actualización de la tasa lo que es una «demagogia y poca responsabilidad«, especialmente cuando «en otras ciudades gobernadas por el Partido Popular o Izquierda Unida se están actualizando las tasas de manera similar«.
En rueda de prensa el ejecutivo local ha anunciado una medida significativa de apoyo a sus ciudadanos más vulnerables. Las familias de dos miembros con rentas que no excedan los 16.800 euros anuales se beneficiarán de una bonificación del 50% en la tasa de basura. Además, en el caso de los jubilados, una vez concedida la bonificación, se les aplicará automáticamente en los años sucesivos, eliminando la necesidad de renovación anual.
Una subida de tasas de la basura que afecta a todas las poblaciones
El concejal de Hacienda, Ramón Poveda, ha remarcado que Petrer va a seguir siendo una de las localidades con la tasa de basura más baja de la provincia, incluso después del ajuste, situándose muy por debajo de lo que ciudades como Benidorm o La Nucía, gobernadas por el PP, están cobrando y que han situado la tasa en cerca de los doscientos euros anuales.
También otras poblaciones como Novelda la ha situado en 128,7 €; el municipio de Altea gobernado por PSOE y Compromís pasa de 75,84 € a 97 €; y Dolores, en la Vega Baja, que sitúa la tasa de 90 a 140 €. “Hablar de porcentajes es poco rigurosos ya que había municipios que ya tenían una tasa muy alta y por tanto, ahora la subida porcentual ha sido menor pero al final lo que va a pagar el vecino es mucho más que en Petrer”, ha indicado.
“Es una medida que no nos gusta y que nunca hubiéramos tomado por iniciativa propia”, ha recordado Poveda quien ha sido muy duro con quienes han cuestionado que esta ley sea de obligado cumplimiento y emana de una directriz europea: “es poco serio que un concejal no sepa estas cosas o las cuestione sin ningún conocimiento”.