Raúl Asencio revoluciona el mercado tradicional de las “monas de pascua” con una nueva masa a base de boniato y calabaza y abriendo este producto al resto de España gracias a su venta a través de Internet.
El maestro pastelero Raúl Asencio ha decidido dar un paso más en el mundo de las “monas de pascua”. Para ello ha creado una receta única y propia en la que el boniato y la calabaza son las bases de su masa, enriquecida con muchos otros ingredientes, que le dan un sabor especial que está triunfando entre sus clientes.
Esta masa necesita, además, un soporte de cartón para su cocción, ya que “si no se desparramaría por la cantidad de ingredientes que lleva”, explicaba Asencio. Este nuevo sabor “gusta más que el tradicional”, reconocía el pastelero, que además ha iniciado la venta de este producto típico de la zona durante estos días a través de su página web (www.raulasencio.es) para toda España. Una iniciativa que, sorprendentemente, ha tenido muy buena acogida a lo largo de toda la geografía española, expandiendo así nuestras costumbre a muchos lugares.
Pero también ha pensado en el público infantil. Ellos, los más pequeños de la casa, cuentan con monas con pepitas de chocolate, con un formato más pequeño y con muchos modelos, pero con la masa revolucionaria de Raúl Asencio.
Por otro lado, Asencio destacaba también el incremento en la venta de Panetones durante estos días. “Contamos con siete variedades distintas de este producto, algo de lo que no muchos pueden presumir”, apuntaba. Entre los más destacados y demandados están los rellenos de chocolate y avellanas o los cubiertos con pepitas de chocolate y Oreo.
Los que no la hayan probado pueden hacerlo aprovechando que este lunes se celebra el día de la 2ª Mona en Novelda. Se pueden adquirir en sus pastelerías de Aspe (Parque Doctor Calatayud, 18) o Novelda (Avenida de la Constitución, 43), que abrirán incluso el mismo lunes.
¿Y dónde está el huevo duro?
Señor pastelero, esto será lo que sea menos una mona. Será otro producto de repostería, llámese pseudo panetone o como lo quiera usted llamar, pero no una mona, jamás.
Me parece estupendo que haga un nuevo producto con una nueva receta. Por lo tanto si es un nuevo producto póngale un nuevo nombre.
Por las fotos que veo en su reportaje la forma está entre toña, por la parte de arriba, y magdalena, por los laterales. Y si encima la masa es distinta… Sería lo mismo que si yo le llamara bicicleta al teclado con el que estoy escribiendo. Me llamarían, cuando menos, tonto. Si de verdad quiere hacer monas pregunte usted en los hornos de Novelda qué es una mona y supongo que no tendrán ningún inconveniente en enseñarle como se hace. Yo no sé hacerla. No pertenezco a ese sector. Sólo me dedico a disfrutar comiéndome la mona que hacen mis paisanos, que por cierto están muy buenas.
En Alberique o Alberic hacen un producto parecido a la toña, el panquemado. Pero no está igual. Aquello es un panquemado y lo de Novelda una toña. Así de sencillo. Así que déjense de chorradas y no nos toque la moral a los novelderos. No desvirtuemos más las cosas. O ¿le gustaría a usted, maestro pastelero, que en vez de llamarle así le llamásemos aprendiz de carpintero? ¿Y al establecimiento que regenta videoclub, en vez de pastelería? Así que pastelero a tus pasteles y deja el idioma para otros y no se convierta en “maestro de atar escobas”.