La Unidad de Drones de la Policía Local fue fundamental en la actuación
En la tarde del pasado 15 de septiembre tuvo lugar el rescate de una mujer mayor que se había precipitado al suelo en su vivienda gracias al trabajo conjunto de la Policía Local y del Parque de Bomberos de Elda.
El intendente de la Policía Local de Novelda, Rafa Sarrió, ha explicado que sobre las 20:00h el cuerpo de seguridad recibió una llamada realizada por los familiares de una persona mayor que había caído en el interior de su domicilio que no podía levantarse y que, «por diversas razones», los familiares no podían acceder a la vivienda.
Indica que una patrulla de la Policía Local acudió al edificio para comprobar si podían acceder al mismo. Resultó que el domicilio se encontraba en un cuarto piso y suponía un problema de seguridad para los agentes ascender a la vivienda a través de las terrazas.
Por ello, el cuerpo de seguridad contactó rápidamente con el Parque de Bomberos de Elda, que envió una unidad para comprobar cómo poder acceder a la vivienda.
Con todo, señala que la nueva Unidad de Drones, que se encontraba vigilando la zona rural, se desplazó al domicilio y descubrió al acercarse a la fachada el lugar idóneo por donde debían acceder los bomberos para rescatar a la mujer, conociendo así la facilidad de acceso y qué material exacto les sería necesario para acceder a la vivienda.
Tras ello, un equipo especial de Bomberos acudió al municipio con la plataforma necesaria para el rescate. Los bomberos accedieron a la cuarta planta y entraron por la ventana que vislumbró el Dron de la Policía Local, logrando auxiliar a la persona mayor.
La mujer fue atendida por una ambulancia de Soporte Vital, comprobando que sus heridas no revestían signos de gravedad.
«Este es otro servicio más que nos pone sobre la mesa que el equipo Dron esta cumpliendo una función importantísima y que podemos utilizarla en diversos campos y situaciones», ha concluido Sarrió.
De verdad, no me explico cómo hemos podido llegar vivos a día de hoy sin el dron. Debe ser que hemos tenido una suerte inmensa o que algún Santo de primer nivel nos ha estado protegiendo sin descanso ni vacaciones. Desde luego hay un antes y un después desde la llegada de tan prodigiosa máquina a nuestras vidas. Menos mal que estaba operativo el artilugio de marras, porque si no, pobres bomberos y pobre señora mayor.