Tribuna de opinión de Marga Serrano
Los socialistas y las mentiras van de la mano, lo hemos podido comprobar tanto en el Gobierno central como en el local. Y es que lo de mentir lo llevan en su ADN. Tenemos un presidente que es un mentiroso crónico, compulsivo. Recordemos su frase en 2019 “no pactaría con Podemos, sería un presidente del Gobierno que no dormiría por las noches”, donde dije digo, digo Diego.
Pactó con ellos sellándolo con el abrazo de la vergüenza, se acostó moderado y se levantó ultraizquierdista, virando radicalmente y cerrando en 48 horas un preacuerdo con quien le provocaba insomnio. Y sigue con sus embustes, y falacias, con declaraciones que todos hemos escuchado: “traeré a Puigdemont para rendir cuentas ante la Justicia española”, “no habrá indultos”, “no habrá reducción de condenas por malversación”, “no pactaré con Bildu”, “para nosotros ni el referéndum, ni la amnistía es posible”, “la amnistía que piden los independentistas no va a ser aceptada”, “la amnistía no cabe en la Constitución”, pero no solo él miente, varios de sus ministros también lo han hecho públicamente.
Al final todo mentira, nada de lo dicho vale, por mantenerse en el poder compra siete votos a dos mil millones de euros por voto, con el dinero de todos los españoles y cambia su discurso: “la amnistía es una forma de superar las consecuencias judiciales de la crisis”, “defiendo hoy la amnistía en Cataluña por los hechos acaecidos en la última década”.
A nivel local los socialistas también nos han mentido, cuando adjudicaron el contrato de la “basura” diciendo que su encarecimiento no iba a suponer un aumento en la tasa.Nos han mentido diciendo: “que los noveldenses pueden tener la certeza absoluta que este equipo de gobierno no va a aumentar los ingresos estructurales”. Pues si lo han hecho, aumentando las tasas de “basura” y vados en los presupuestos de 2024.
Nos han mentido diciendo: que el aumento de la tasa de basura ha sido consecuencia de la Ley 7/2022, de residuos y suelos contaminados, cuya repercusión en la tasa es de 230.000 €, lo que realmente sube la tasa es la adjudicación y contratación del nuevo servicio, que aumentó con respecto al anterior un 94%, unos 704.000 € más al año aproximadamente, pasando de 747.927 € que costaba el servicio en 2022, a 1.451.914 €, que ya estamos pagando desde el 01 de enero. Respecto al canon del Consorcio por gestión de residuos en la planta, los últimos años ya veníamos liquidando sobre 500.00 €, no 300.000 € como dijeron en Pleno.
Estas solo son algunas perlas, ¿veremos que nos depara el futuro! Visto lo visto, los socialistas mienten por mantenerse en el poder, las personas y los valores poco les importamos.